La convocatoria partirá a las 17 hs, desde la Plaza Belgrano de la capital jujeña. Mientras en Libertador General San Martín partirán desde el Canal de la Calera a las 18 hs.

Desde 2015, cientas de miles de mujeres nos ponemos de pie cada 3 de junio para gritar ¡Ni una menos! porque ¡Vivas nos queremos! contra la aberrante escalada de femicidios que se cobra la vida de una mujer cada 18 horas en nuestro país. Nuestro potente movimiento puso en evidencia que los femicidios constituyen el último eslabón de una larga cadena de opresión y violencia que pesa sobre la vida de las mujeres, se extendió a lo largo y ancho del país con el primer #ParoDeMujeres en 2016 y trascendió las fronteras nacionales con dos paros internacionales de mujeres el 8 de marzo, de 2017 y 2018.

Pusimos en agenda nuestros reclamos, y conquistamos que tras años de lucha se abra en el Congreso el debate sobre el Proyecto de Interrupción Voluntaria del Embarazo, presentado por la Campaña Nacional por el Derecho al Aborto en seis oportunidades, y cajoneado sucesivamente por los gobierno kirchneristas. Pero no nos dejamos engañar, sabemos que el gobierno de los CEOs de Mauricio Macri pretende hacer demagogia con este derecho, mientras mantiene los lazos del Estado con la Iglesia, mientras impulsa un saqueo brutal contra la vida del pueblo trabajador, del cual las más afectadas somos las mujeres, mientras nos niega una medida elemental como es la sanción de un Plan de Emergencia contra la violencia de género, y no duda en reprimir a las mujeres que pelean contra los despidos, contra el recorte a los salarios, como en el Subte.

Porque sabemos que ningún gobierno nos ha regalado nada, este 4 de junio, a días del tratamiento del Proyecto de Interrupción Voluntaria del Embarazo en Diputados, tenemos que ganar las calles para reclamar su aprobación inmediata, porque no queremos ni una muerta más por abortos clandestinos! Educación sexual integral ya en todos los niveles educativos. Separación de la Iglesia del Estado.

Porque sabemos que la deuda es un mecanismo de saqueo del capital internacional sobre nuestros recursos que condena al país a la decadencia. Porque las mujeres somos las primeras en perder los empleos y las últimas en ser contratadas, porque se considera que nuestro trabajo es complementario al del "jefe del hogar". Porque las condiciones de ajuste que impone el FMI y organismos internacionales, contribuye a acrecentar la feminización de la pobreza, llevando a que aumente el trabajo no remunerado de las mujeres y niñas para garantizar bienes y servicios que el Estado deja de cubrir vía ajustes. Por eso este 4 de junio levantemos en un solo grito: ¡La deuda es con nosotras! Fuera el FMI! ¡No al pago de la deuda!

Tenemos que terminar con la historia repetida del saqueo nacional: que esta vez la crisis no la paguemos con hambre, inflación, desocupación, precarización del pueblo trabajador y sangre, sudor y lágrimas de las mujeres. Que la crisis, la paguen los capitalistas.