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Donnelley: un balance “codido”

En medio de nuestro festejo por haber conseguido el 38%, la efectivización de los contratados y un puesto para el familiar de un compañero fallecido y la obra social para su familia, mientras la fábrica estaba todavía con cierta resaca por algún que otro brindis por el paso dado luego de tener el taller parado otra vez 12 horas, nos llega la Prensa Obrera para explicarnos a los trabajadores que la “alegría” sólo debería ser brasilera, y que nosotros estábamos equivocados en nuestro festejo.

Miguel Bravetti, que ya dijo que nos guió en nuestra lucha, ahora nos aconsejo no festejar tanto. El motivo sería que la empresa se deshizo de un grupo de activistas a los que les pagó cerca de medio millón de pesos. La verdad es que todos los activistas que fueron echados fueron reincorporados y rechazaron cifras millonarias mostrando una nueva conciencia entre los obreros de Donnelley. Para convencernos de llorar, el artículo del PO hasta confundió los números de los trabajadores que agarraron las indemnizaciones y oculta que no había activistas entre los que decidieron irse. Pero bueno...

La propia empresa trató de hacer el balance de que había un empate. Nadie lo creyó y la demostración más evidente fue que luego del conflicto por despidos, retomamos la pelea por salario y la ganamos.

Nosotros festejamos ahora yendo a otras fábricas, ayudando a organizar a mas trabajadores y también haciendo comités de obreros gráficos del FIT y nos preparamos para el acto del 9 de Julio. Allí estará “el activismo” que se fue forjando, del cual la interna es parte, claro.

Un activista reincorporado