En la provincia de Córdoba se dio quizá la demostración más contundente de que la pelea entre el gobierno nacional y las patronales del campo fue una interna entre capitalistas. Cuando el sojero Schiaretti atacó directamente los haberes de los actuales y futuros jubilados estatales, ningún “pequeño productor” de la nueva burguesía agraria, ni ninguna de las “entidades del campo” levantó su voz, demostrando que aquello de que el “campo somos todos”, quería decir en realidad “todos los que lucramos con la renta de la tierra y la explotación del trabajador rural”.

Pero no parece haberlo entendido así una parte de la izquierda local.
El MST participó activamente de las movilizaciones de los “hijos de los sojeros”, los estudiantes de Ciencias Agrarias que junto a lo más rancio de la clase media local hicieron los cacerolazos en apoyo a la protesta patronal.

No importa si esto le valió el repudio de sectores de trabajadores que luego salieron a luchar contra el recorte del gobernador, donde el MST hizo malabares para intentar convencer que “hay una declaración de apoyo de pequeños productores a la lucha de los trabajadores”, cuando es más que evidente que las patronales del campo, grandes y pequeñas, bancaron en esta “patriada” a su gobernador contra los trabajadores estatales, ya que una jubilación digna es mucho “privilegio”. Pero el MST no estuvo solo en la cruzada campestre.

El FIT ¿Una banca al servicio de qué luchas?

La legisladora Liliana Olivero de Izquierda Socialista, que forma junto al PO el FIT provincial, mantuvo al igual que el MST un rotundo apoyo al paro patronal agrario.

El Partido Obrero, según su propia presentación en el sitio oficial regional es parte de la banca del FIT con su referente provincial, como asesor en la Legislatura. El puesto legislativo del FIT es usualmente presentado como “una banca al servicio de las luchas”. En el proyecto de declaración presentado en común el 26/03 (Expte. 0288/L/08) en la Legislatura se exige repudiar el discurso de Cristina, el accionar de las patotas de D’Elía y Moyano y se convoca a la más amplia movilización y deliberación de los trabajadores, junto a los pequeños productores. Y entre los fundamentos se critica al gobierno porque “dice que es un “paro de la oligarquía”, pero los pequeños productores son mayoría en los cortes y manifestaciones”. Se critica a la Sociedad Rural, pero no a las otras entidades patronales. Repetimos, este proyecto fue presentado por el bloque del FIT de Izquierda Socialista y el PO. Nada dice del lockout patronal, de los intereses reaccionarios del conjunto de las entidades, de la responsabilidad de éstas en el desabastecimiento, es decir, una propuesta con un claro contenido inclinado hacia el bando campestre. (versión completa en http://po-cordoba.blogspot.com/2008/05/proyecto-de-declaración-frente-al.html).
El 31/07, es decir cinco meses después de desatado el conflicto, el dirigente de PO de Córdoba, Eduardo Salas, el mismo compañero que asesora a Olivero en el bloque, publica una crítica sobre “las contradicciones de Izquierda Socialista” (PO 1048) donde, en general, refuta correctamente los argumentos de Olivero a favor de que la resolución del conflicto habría sido positiva para los trabajadores y el pueblo. Y convoca a una discusión metódica sobre estas diferencias. Sin embargo, hasta hoy el PO mantiene su alianza en el bloque del FIT y no se conoce una delimitación pública de la resolución impulsada en la Legislatura cordobesa.

Cuando se conformó el FIT, desde el PTS planteamos que su negativa a hacer un frente verdaderamente clasista y socialista, se debía a que en el fondo el carácter del FIT era similar a la vieja Izquierda Unida, donde la necesidad de la independencia política de los trabajadores estaba diluida en un programa general, a la misma altura que la discusión sobre los baches o los semáforos de la ciudad (Ver LVO 240 28/06/07).

Debate abierto

Efectivamente, es necesario un “debate metódico” y una clarificación de las posiciones de la izquierda, luego de las profundas divergencias estratégicas que se expresaron durante el conflicto agrario. Estamos seguros de que muchos de los que votaron al FIT no comparten esta postura a favor de las patronales del campo que adoptó Olivero. Con muchos de estos simpatizantes de la izquierda venimos de dar una dura pelea en las elecciones docentes, en el marco de la lista Fucsia (ver aparte). Es necesario aclarar estas posiciones en la izquierda y en la vanguardia, más aún hoy cuando todavía está planteada una disputa entre el gobernador sojero y los miles de estatales que están en lucha. Nuestra propuesta es realizar una asamblea o plenario provincial de la izquierda que se reivindica obrera y socialista, abierta a la vanguardia que apoya una perspectiva independiente de los bandos capitalistas, para llevar adelante esta importante discusión. Llamamos al PO a dar una pelea común. Ya, en algunos lugares tuvo que ponerle fin a sus alianzas con la izquierda sojera (ver carta abierta al PO), comenzando a reconocer que la razón estaba del lado de quienes criticamos esos acuerdos que el PO mantuvo durante todos estos años, mientras se negó sistemáticamente a poner en pie bloques o frentes clasistas y socialistas. Los llamamos a conformar un bloque independiente del gobierno y la oposición sojera, por una salida obrera y socialista, más aún en Córdoba, donde la lucha de los trabajadores estatales está siendo llevada por sus direcciones hacia algún sector patronal, y se hace imprescindible una alternativa de independencia de clase.