Apenas 3 días antes que Cristina anuncie el “Plan de Redistribución Social”, el gobernador Barrionuevo de Jujuy, un mimado del matrimonio presidencial, ordenó una brutal represión contra una movilización de desocupados, mujeres y niños, en La Quiaca, donde el 60% de la población no tiene trabajo.
Aunque el gobierno debió hacer correcciones al decreto del 11 de marzo, que significan concesiones al lock out ruralista, y perdió durante la crisis al ministro de Economía Lousteau; los Kirchner no retrocedieron del plan de retenciones móviles, hasta ahora.
El pasado viernes 6 de junio se hizo pública, a través de los medios nacionales, la violenta represión desatada contra los desocupados y pobres de La Quiaca. Muchos compañeros cayeron heridos por la saña de la policía que disparó a mansalva con balas de goma.
El hambre se cierne sobre decenas de países mientras la inflación destruye los salarios. En ese marco se realizó la Cumbre de la FAO en Roma entre el 3 y 5 de junio. Si de ellos depende, lo peor está por venir. La única salida está en manos de la clase obrera y las masas pobres.
El alza en los precios del petróleo ha provocado en las últimas semanas una oleada de protestas a lo largo del viejo continente protagonizadas por sectores de pescadores, agricultores y transportistas.
El pasado lunes 9 de junio, decenas de miles de trabajadores, juntas de vecinos, sectores populares y campesinos, aproximadamente 100.000, se movilizaron a las puertas de la embajada norteamericana en La Paz, para repudiar la decisión de este país de otorgar asilo político al asesino Sánchez Berzain, quien tiene como defensor al asesor del presidenciable demócrata Barack Obama, y exigir “justicia” a los familiares y a las víctimas de la represión en octubre del 2003.
El pasado 10 de junio, cientos de miles de manifestantes colmaron las calles de Seul para protestar contra el gobierno pronorteamericano del presidente Lee Myong-bak, del derechista Gran Partido Nacional.
En las últimas semanas la campaña crece sumando firmas de cientos de trabajadores y estudiantes. La asamblea de la Facultad de Ciencias Sociales - UBA adhirió a esta declaración. Llamamos a impulsarla y promoverla en los centros de estudiantes, entre los delegados y dirigentes obreros combatibos de todo el país.
Hay símbolos que denotan un irrefutable desprecio por la vida humana. 6 millones de litros de leche fueron arrojados al desperdicio desde los tambos y los camiones lácteos. Una ilustración suficiente para demostrar la desidia de los piquetes de los patrones agrarios y de los contrapiquetes de los patrones transportistas de cereales, alentados por la chequera del gobierno.
Los trabajadores de Mafissa continúan con el acampe frente a Gobernación, a pesar del completo silencio del gobierno de Scioli.