El sábado 21 de septiembre se llevó a cabo una importante asamblea de trabajadores del distrito minero de Huanuni, que determinó aceptar la renuncia de los tres primeros dirigentes del sindicato y elegir un comité electoral que en el plazo más breve debe organizar nuevas elecciones sindicales. Esta determinación es el resultado de una política de estrangulamiento financiero e intentos de dividir al sindicato por parte de la burocracia sindical oficialista, que ve en el sindicato y particularmente en su ala izquierda un obstáculo en el objetivo de derrotar a este valiente distrito.

La huelga de mayo y la vanguardia minera

Durante el mes de mayo la huelga con bloqueo de caminos convocada por la COB tuvo como un sector de vanguardia a los trabajadores mineros de este distrito quienes no solo paralizaron actividades sino que decidieron movilizarse en número de 5.000 a la ciudad de la Paz. La lucha de los trabajadores y particularmente de los mineros mostró el proceso incipiente de ruptura política de los trabajadores con el gobierno del MAS provocado por años de permanente colaboración con el empresariado y con el sector adinerado de las cooperativas mineras. Ya durante el año 2012 se había producido la importante lucha de los asalariados mineros de Colquiri exigiendo la nacionalización del yacimiento y la expulsión de la trasnacional SinchiWayra y de las cooperativas del distrito. Este importante proceso de lucha implicó la toma del yacimiento no solo de los asalariados sino de cientos de cooperativistas pobres que vieron en la nacionalización una salida a la explotación y precarización laboral que sufren por parte de los cooperativistas ricos. El asesinato de compañero Víctor Choque en el asalto de los cooperativistas a la sede de la FSTMB y la entrega por parte del gobierno de la valiosa veta “rosario” empujó a importantes franjas de trabajadores a la oposición al gobierno del MAS. La ruptura del diálogo entre el MAS y la COB a causa de la ley de pensiones del gobierno que exime del aporte jubilatorio a los empresarios y a todo el sector patronal y al Estado, preservando lo esencial de la ley de pensiones neoliberal de Sánchez de Losada, detonó un proceso nacional de movilización y lucha de decenas de miles de trabajadores asalariados por una nueva ley de pensiones. La respuesta del gobierno durante el mes de mayo se redujo a una salvaje represión con más de 400 trabajadores detenidos durante la huelga, represión masiva en la localidad de Parotani a los trabajadores fabriles y finalmente el ataque a los mineros de Huanuni en el punto de bloqueo de Caihuasi. Todos estos elementos empujaron aún más a los trabajadores a la oposición política no solo en las calles sino también en la discusión sobre el Partido de los Trabajadores basado en los sindicatos, discusión que tuvo al sindicato y a los trabajadores de Huanuni a la vanguardia.

El MAS busca derrotar a la vanguardia minera

Luego de la escandalosa suspensión de la huelga por parte del burócrata de la COB Juan Carlos Trujillo y del retorno de los trabajadores mineros a su distrito, el gobierno lanzó su contraofensiva basada en el procesamiento de los 22 mineros de Huanuni acusados de la voladura del puente de Caihuasi, el desembarco de la contraloría de la república a revisar las cuentas de la Empresa Minera Huanuni (EMH) amenazando el control obrero colectivo, y la amenaza de estrangulamiento financiero a la empresa. Todo esto tuvo el efecto de provocar temor en los trabajadores donde un importante sector vio en este ataque una amenaza a la estabilidad laboral y a la viabilidad del yacimiento que necesita importantes inversiones en exploración y prospección minera en busca de aumentar las reservas del yacimiento.

Huanuni se declara en alerta contra intento de cooperativización

La campaña gubernamental contra los trabajadores mineros sin embargo llegó al punto de plantear la necesidad de la cooperativización como único mecanismo ante la caída de rentabilidad de la empresa. Una importante campaña de rumores sobre la eventual quiebra de la EMH y su entrega a las cooperativas sostenida por declaraciones de viceministros y por parte de viejos dirigentes privatizadores como Hugo Pereyra, o Pedro Montes, ex ejecutivo de la COB y operador del MAS, condujeron a una situación de aislamiento de la vanguardia y desorganización de las filas obreras a causa de la confusión y el temor provocado. Se desempolvaba así el viejo proyecto del MAS de cooperativizar Huanuni y por esa vía llevar a la derrota definitiva de este bastión obrero. Cabe recordar que ya en 2006 el MAS alentó la toma del yacimiento por parte del ministro Villarroel, quien de la mano de los cooperativistas adinerados forzaron un ataque que terminó con 16 muertos y decenas de heridos. La resistencia no solo de los mineros, sino de los estudiantes, desocupados y toda la población evitó la cooperativización, y el MAS se vio obligado a aceptar la incorporación a la empresa de 4000 trabajadores nuevos como resultado de la victoria obrera.

Sin embargo esa ola de rumores fue parada en seco por una reunión de todas las organizaciones de Huanuni (desocupados, maestros, centros culturales, centros estudiantes etc.) auspiciada por la Federación Sindical de Trabajadores Mineros de Bolivia, quienes se declararon en estado de emergencia y amenazaron movilizar a todo el distrito de proseguir con esos objetivos anti obreros. En la asamblea del 21 de septiembre ni los más redomados agentes del gobierno se atrevieron a pronunciar la palabra cooperativización.

Reorganizar las filas obreras y romper el aislamiento

Como parte de este ataque, en la última asamblea el gobierno logró un punto de apoyo al provocar la división de los trabajadores quienes empiezan a ver en el sindicato y el Partido de los Trabajadores la causa de este ataque. Así, provocaron la renuncia de los tres primeros dirigentes y la convocatoria a próximas elecciones sindicales, aunque no pudieron abrir las puertas a la discusión sobre el futuro de la empresa en una eventual cooperativa

Frente a este escenario se impone la urgente tarea de rodear de solidaridad a los trabajadores mineros de Huanuni, exigiendo que se termine el fraudulento procesamiento a los 22 trabajadores y exigiendo que el gobierno del MAS ponga los 56 millones de dólares que Huanuni necesita para el desarrollo los proyectos que prolongarían la vida del yacimiento y permitirían aumentar la productividad de la empresa.

La reflexión sobre el futuro de Huanuni no puede ser pensar en términos de una isla. El futuro de Huanuni está ligado al futuro de toda la minería, lo que implica empezar a discutir y pelear por extender la lucha por la nacionalización de la minería trasnacionalizada formulando un plan de incorporación como asalariados de miles de humildes y pobres cooperativistas que hoy están a merced de un empresariado precarizador como son los dueños y cooperativistas ricos. Solo la extensión de la minería nacionalizada formulando un plan nacional controlado por los trabajadores puede ofrecer una salida progresiva a la eventual caída de precios. Hace falta la urgente reorganización de la vanguardia minera para preparar estas y otras propuestas en las próximas elecciones sindicales.

Partido de Trabajadores avanza lentamente pese a los ataques del MAS

El primer impacto de esta ofensiva del gobierno se está sintiendo al interior del Partido de los Trabajadores, donde las alas y sectores reformistas intentan aprovechar este retroceso parcial en Huanuni para buscar ocupar posiciones más favorables a su estrategia. Sin embargo tanto los congresos departamentales llevados a cabo en la ciudad de Cochabamba y La Paz con una participación de casi 200 delegados cada una se pronunciaron categóricamente por la defensa del distrito minero, la exigencia del desprocesamiento de los 22 trabajadores y el rechazo a las declaraciones de algunos dirigentes que sugirieron abrir un diálogo con fuerzas de oposición burguesas como el MSM o descontentos del MAS como la diputada Rebeca Delgado. Estos congresos departamentales llevados a cabo el 23 y 24 de septiembre respectivamente eligieron sus direcciones departamentales y debatieron el inicio en las universidades, centros de trabajo de una campaña por la defensa de Huanuni y contra el ataque del MAS en el camino de conquistar la legalidad del partido para la participación electoral el 2014. El partido de los Trabajadores se apresta a convocar a su tercer congreso en los próximos meses a efectos de elegir una dirección definitiva que será la mandatada para la organización del partido y la campaña por la legalidad. Trujillo de la COB ya ha intentado rechazar cualquier compromiso con el PT pese a tratarse de resoluciones del XV congreso de la COB y del XXXI congreso minero. A este escenario la lucha política contra la burocracia sindical oficialista tenderá a desarrollarse y para tal fin los trabajadores, los estudiantes y todos aquellos que están dispuestos a defender una orientación de independencia de clase junto al ala izquierda de los trabajadores de Huanuni venimos coordinando acciones comunes en todos los departamentos donde contamos con presencia.