La empresa que mantuvo durante mucho tiempo el trabajo en negro, con jornadas extenuantes, sin cumplir el Convenio Colectivo, negando los derechos sindicales y una atención médica adecuada (con casos de pérdidas de embarazo), despide el lunes injustamente a dos trabajadores: María Ugarte y Eduardo Toro.

A más de un mes de que la trabajadora de la textil Elemento, Marina, decidiera prenderse fuego así misma, cansada de los maltratos que sufre hace 19 años en esta empresa, esta última responde con dos despidos injustificados.

Ambos trabajadores, junto al resto, luego de lo sucedido con Marina habían decidido organizarse y solidarizarse con ella. Realizaron colectas y festivales, y lograron que se cumplan los mínimos derechos laborales de 48 horas semanales y sin trabajar los sábados. La unidad fue la clave para este triunfo.

El lunes no permitieron el ingreso de María, trabajadora inmigrante de Bolivia, a pesar de haber dejado 12 años de su vida en el sector de plancha y dos embarazos. La respuesta de sus compañeros fue espontánea e inmediata solidarizándose con la compañera juntándose en los distintos sectores. La empresa que también produce para Cheeky (cuya dueña es Juliana Awada, esposa de Macri), marca denunciada por trabajo esclavo, respondió con el despido de Eduardo.

Pero ellos rechazaron este despido

La conmoción e indignación por todos estos hechos que empezaron a salir a la luz, hicieron que cientos de organizaciones y personalidades rápidamente se solidarizaran y se pusieran a disposición de los trabajadores. En dos días recibieron el apoyo y firmas de referentes políticos, sociales y organismos de DD.HH., como las Madres de Plaza de Mayo Línea Fundadora, Liga Argentina por los Derechos del Hombre, Asociación Ex Detenidos Desaparecidos y el CeProDH. Asimismo, hay un proyecto de resolución en la cámara de diputados, legisladores de distintos bloques, comuneros así como también dirigentes de las dos CTA y de distintos gremios. Se impulsó un fondo de lucha desde los centros de estudiantes y agrupaciones sindicales y desde Brukman, textil bajo control de sus trabajadores, se decidió en asamblea dar el más enérgico apoyo y donar un ambo.

Tenemos que profundizar la campaña de solidaridad de todas las organizaciones sociales, políticas, de DD HH, trabajadores y vecinos; juntando firmas y acercándole la solidaridad a los trabajadores y acompañando todo lo que decidan para reincorporar a los compañeros. No podemos permitir que esta patronal siga maltratando trabajadoras y trabajadores en la Ciudad Buenos Aires. Exijamos la inmediata reincorporación de María Ugarte y Eduardo Toro y el cese de los maltratos y persecución hacia el conjunto de los trabajadores y trabajadoras.