El enfrentamiento de Perón con Patrón Costas y los oligarcas salteños tiene una buena cuota de mito.

Si las concesiones a los reclamos obreros y el Estatuto del Peón habían envalentonado a los trabajadores de los ingenios, más temprano que tarde el general pondría las cosas en claro.
El primer gobernador peronista de Salta sería nada menos que el Dr. Lucio Cornejo Linares, uno de los propietarios del Ingenio San Isidro. Durante su gobierno se desataría un gran conflicto por reclamos salariales y de condiciones de trabajo, donde las dos federaciones que nucleaban a los obreros de los ingenios iniciaron una huelga por tiempo indeterminado. El Ministerio de Trabajo declararía la ilegalidad de la medida, y retiraría la personería a los gremios (Agroindustria azucarera y sindicatos en la provincia de Salta, 1943-1955).

Perón realizaría un discurso a todos los salteños, donde luego de mediar en el conflicto apuntaría contra “los comunistas infiltrados, los políticos opositores y la falta de previsión y acción local. Los dirigentes de la F.O.T.I.A. y de la F.E.I.A. han conducido a los trabajadores a la huelga utilizándolos como trampolín para sus aspiraciones políticas” (El Tribuno, enero de 1949).

La próxima medida bonapartista sería más dura. El 18 de abril de 1949 una huelga general de la CGT salteña sería duramente reprimida, con 40 heridos y 4 muertos como saldo.
Peor la pasaron los integrantes de la etnia pilagá. En 1947, habían llegado al ingenio El Tabacal, con sus hijos alzados, a trabajar como braceros por una paga que no se cumplió. Despedidos por Patrón Costas, fueron corridos de la provincia por la Gendarmería Nacional, que en la llamada masacre de Rincón Bomba ametralló el campamento simulando un enfrentamiento: 750 originarios muertos, ni un solo gendarme.
El mito se completa con la famosa expropiación de la que habría sido víctima la familia oligárquica. En realidad el gobierno peronista compró 100 hectáreas, de las 963 mil que llegó a tener la familia, por las que abonó la suma de $ 43.667,04.

Por eso, sin tanto rollo, Milagritos Patrón Costas, heredera de la familia y presidenta de la Sociedad Rural de Salta, fue elegida diputada provincial por el Partido Justicialista, detrás de los nombres de Cristina Kirchner y Juan Manuel Urtubey.