La campaña de la Juventud del PTS por la cárcel a Blaquier y los asesinos de Ledesma

Entrevistamos a Daniela estudiante de Letras y a Romina estudiante de Antropología que nos cuentan como viene la campaña y algunas discusiones que se generaron en la facultad de Humanidades y un debate con la juventud universitaria de la CCC.

¿Por qué surge esta campaña?

Daniela: En Jujuy suenan los fuegos artificiales y desfilan las carrozas de la Fiesta del Estudiante armada por el gobierno, pero hay una insoportable impunidad. Luego del asesinato de tres trabajadores en Ledesma que reclamaban vivienda el 28 de Julio: Juan Velázquez, trabajador municipal, los jóvenes Ariel Farfán y Félix Reyes, obrero del citrus, se realizaron dos grandes movilizaciones, encabezadas por las organizaciones sociales en las que participamos. Pero con el correr de los días, las tomas en un principio se generalizaban, pero el pedido de justicia iba quedando de lado.

Romina: Si, tanto es así que se fue diluyendo, aunque hubo una marcha de los familiares de las víctimas en Ledesma. Y nuestros compañeros en la facultad nos decían, “es como que nadie dice nada…” Y ahí nos dimos cuenta que como juventud, no podíamos dejar que nos maten, que un genocida de la dictadura como Blaquier vuelva a matar y quede impune. Que en una facultad de Humanidades ni el centro, ni las autoridades, ni las agrupaciones hagan algo. Por eso decidimos romper el silencio que nos quieren imponer y salimos con esta campaña.

¿Cómo vienen las actividades?

R: En la facultad de Humanidades y Ciencias Sociales, lanzamos una declaración, extensa y muy clara, exigiendo a las autoridades universitarias que se pronuncien por la cárcel al genocida Blaquier y a todos los funcionarios del gobierno de Barrionuevo. En dos semanas, juntamos mas de 300 firmas de estudiantes, y algunos docentes. Es más del 10% del total de estudiantes que cursan efectivamente. El apoyo viene, en su gran mayoría, de jóvenes trabajadores o hijos de trabajadores precarizados que estudian en la universidad pública, miembros de familias numerosas que viven hacinadas o que pagan elevados alquileres porque no acceden a un plan de vivienda.

D: También acabamos de sacar 3000 afiches para pegar en toda las facultades, en San Salvador y Ledesma. Vamos a seguir agitando en la facultad, sumando a más jóvenes, exigiendo al Consejo Académico, al Centro y a todas las instituciones universitarias que se pronuncien. Por todos lados nos vamos a hacer oír, aunque por ahora somos la única agrupación que esta haciendo esto.

R: Es que tenemos un objetivo claro, que no quede impune una vez más un genocida como Blaquier. Y esta es una cuestión central, para que los trabajadores y jóvenes que pelean por la vivienda, avancen hacia una conciencia clasista, que no entren a la trampa de tierra a cambio de impunidad, como ya sucedió en los 70´, cuando la patronal luego del Apagón del 76 y la desaparición de 36 trabajadores y jóvenes, entregó tierras para hacer un parque nacional de Calilegua, para congraciarse con la gente. Una canallada.

Nos decías, que hay una discusión sobre la impunidad donde se discute si son 3 o 4 los asesinatos impunes, ¿Cómo es eso?

R: Si, el tema es que desde apenas que sucedieron los hechos, los medios solo reflejaban la muerte de un joven policía. Luego tuvieron que mostraron a los jóvenes trabajadores, no les quedaba otra, era un escándalo nacional.
Desde ahí los medios se encargaron de poner por igual, la muerte de un joven pibe de la policía que actuó junto a cientos de uniformados que tiraron balas de plomo, con la de las familias que resistieron el desalojo. No desconocemos que miles de jóvenes pobres se enrolan en la policía como un empleo ante la miseria capitalista. Esta es la triste historia del agente Farfan, un joven que estaba ahí mandado por los comisarios que usan a sectores de la juventud para ir a matar al pueblo. Ahora utilizan esta muerte para manipular la opinión publica con una campaña de los medios para confundir a la población sobre el carácter de la lucha. Es que hay muchas familias que encuentran en la policía un trabajo para sus hijos, porque es tan grande la desocupación y el trabajo precario, que se terminan refugiando ahí. Lamentablemente, la juventud si no es policía, acepta el plan o trabajados precarios, cuando no termina en el paco. Esta es la realidad de gran parte de la juventud de Jujuy.

D: En Ledesma hubo un intento de desalojo de las fuerzas policiales contra los que no tienen techo y un combate de más de 7 horas entre dos fuerzas de clase enfrentadas. Esa es la verdad y hay que definirse. Ahí se producen los caídos y en primer lugar el responsable es el juez que ordenó el desalojo, el gobernador y el comisario. Mandaron a matar y muchos de los policías son pibes jóvenes, como el que cayó, un pibe de familia pobre. Y aunque también la policía tiene problemas de vivienda, nosotros a diferencia de otras organizaciones, como la CCC, consideramos que no son de la clase trabajadora al igual que un docente o una enfermera. Sino que les dan el “trabajo” de defender con armas a los poderosos contra los que no tienen nada, los ponen a defender la propiedad de grandes terratenientes y personajes siniestros como Blaquier. Es un “trabajo” contra el pueblo pobre y a favor del capital, lamentablemente. Esta verdad elemental es la que no quieren ver los que están en la Tupac Amaru y la CCC.

¿Este debate se da entre la CCC y el PTS?

D: Sí, desde un inicio nos jugamos a dejar en claro, que se trata de 3 víctimas obreras de la represión policial que defiende las tierras del genocida Blaquier. El cuarto muerto también es victima de los capitalistas, pero porque fue usado como carne de cañón contra los trabajadores. Esa es la diferencia. Culpamos de su muerte a la cúpula policial, no a los manifestantes, a los dos detenidos, Claros y Tapia que dicen que dispararon contra ellos, como hace el gobierno y el juez Samman que ordenó el desalojo. Lamentablemente los compañeros de la CCC y su juventud se adaptaron a la campaña de los medios y del gobierno, porque no son “clasistas” de verdad, solo de nombre. Esta posición no aporta sino más bien confunde a la clase trabajadora fortaleciendo la victimización de los agentes del victimario, debilitando la lucha en contra de la impunidad de los compañeros de clase caídos y la solidaridad para con los dos presos por luchar.

R: Si, fijate vos, como el gobierno logró confundir, que hasta ahora sólo hay dos trabajadores presos, acusados de la muerte del policía. Por ahora su estrategia les vino muy bien.

D: En la facultad Sumate, agrupación en la que milita la juventud de la CCC, se negaron a impulsar la declaracion que propusimos. Nos dicen que no exigimos cárcel para los asesinos del policía, ya que consideran que es un trabajador del pueblo, víctima de una treta de Blaquier y que nosotros no comprendemos esto porque aplicamos “el sentido común”, tomamos el marxismo de manera “mecánica” y nos basamos en abstracciones. Los que hacen abstracciones por fuera de las clases sociales son ellos. Nosotros continuamos afirmando que la división de clases sociales existente no puede tomarse como una abstracción.

R: Por otro lado, como tomamos partido por el pueblo pobre y trabajador, no nos incumben las tretas que el Estado y los capitalistas le jueguen a su propio aparato represivo; tal como afirmó Engels, “el Estado no es más que una banda de hombres armados…” que defienden la propiedad privada de los capitalistas.

D: Dejame decir, que el análisis de cualquier situación, sin tener en cuenta esto, es propio del individualismo al cual recurre la sociología burguesa para ocultar el antagonismo de clases, aunque entendemos que en la CCC no se trata de un “error político”, por una suerte de “eclecticismo inconsciente”; sino de una visión desde su estrategia de conciliación entre las clases, que subordina a los trabajadores a sus propios verdugos.

¿Algo más que quieras agregar?

D: Nosotros apostamos a que el odio que siente la juventud pobre y la clase trabajadora contra la policía y personajes como Blaquier, se oriente a una salida independiente de la opresión para cuando la tengamos que enfrentar en momentos más decisivos.

Es en este sentido también que sostenemos que debe estar como tarea central en la agenda de toda juventud que se reivindique revolucionaria, la organización en conjunto con los artistas y trabajadores, la continuidad de la lucha, en la exigencia de justicia por los compañeros asesinados y la libertad de Tapia y Claros, presos por luchar por tierra y vivienda.