Con el transcurso de los años y el devenir de distintos presidentes la zona sur de la Capital se fue convirtiendo en lo que es hoy: Un cementerio de fábricas abandonadas, mientras las pocas que quedan redujeron sus personales a menos de un cuarto de los que supo tener en sus momentos de auge.
Hoy quieren sumar un nuevo cadáver al cementerio.
La tradicional fábrica de galletitas Bagley va a cerrar sus puertas, dejando a más de 250 familias en la calle para engrosar la marea de desocupados que existe en el sur de la capital y en el país entero. Mientras hoy vienen sacando las maquinas de la fabrica y ejerciendo presión sobre los trabajadores para que agarren un retiro voluntario homologado por el gobierno nacional, que no es mas que pan para hoy y hambre para mañana.
Junto con esto, la multinacional Danone dueña de la misma, ahora fusionándose con el Grupo Arcor, pasará a facturar 300 millones de dólares y será la primera productora de galletitas no sólo de Argentina (superando a Terrabusi-Kraft) sino de toda América del Sur.
Sí, para los negocios de los patrones y el gobierno que los apaña los trabajadores somos descartables. Esto es un ejemplo viviente de la “recuperación de la producción nacional” que nos habla todo el tiempo el Dr. K., ganancias multimillonarias a costa de más desocupación y más explotación para los trabajadores.
Ya empieza a aclararse, el gobierno de Kirchner tiene un gran punto de acuerdo con Blumberg y toda la derecha: quieren un estado que defienda los intereses de los empresarios, quieren una democracia para los ricos, donde sigan los salarios de hambre, la desocupación y los millones de dólares que se llevan las multinacionales y los acreedores de la fraudulenta deuda externa.
Es por eso que el gobierno viene encarcelando a decenas de luchadores, como los trabajadores desocupados de Caleta Olivia que querían trabajar o como Castells, mientras los que hundieron el país y los empresarios que llevaron a la quiebra a miles de fábricas siguen impunes. Y no sólo persiguen a los piqueteros sino también mandan la policía contra los trabajadores ocupados, como en Firestone o una grafica en Pompeya que trabaja para Clarín. El gobierno dice que ellos no tienen nada que ver, que es la justicia. Eso es un verso.
En esta democracia para ricos, las ganancias de Dadone son más importantes que el pan para las 250 familias de Bagley.
El plazo para el cierre de Bagley es el mes de diciembre, debemos prepararnos para la defensa de nuestra fuente de trabajo. Si no lo hacemos los trabajadores y el pueblo una nueva lapida engrosará el cementerio de fabricas que es hoy nuestro barrio.

¿Y la directiva del sindicato de la alimentación STIA?: Bien gracias en elecciones…

Sí, en medio del cierre de la Bagley, el 16 de septiembre están las elecciones en el STIA, sindicato de la alimentación.
Allí se presentan los oficialistas de la lista Verde de Daer, archi conocido por su riqueza personal y la pobreza de sus representados, que apañado por el ministerio de trabajo, prepara un fraude electoral para mantenerse al frente del sindicato. Mientras deja librado a su suerte a los trabajadores de Bagley, avalando los retiros voluntarios de la patronal Dadone, con el discurso de “agarra esto que peor es nada”, como viene haciendo hace años en la conducción del gremio de la alimentación. Por otro lado, apareció Giménez y su lista Azul, ex–socio de Daer durante todos estos años de vaciamiento, despidos y cierres de fábricas, haciéndose el opositor pero ante los despidos y el actual intento de cierre de la Bagley mira para otro lado mientras busca votos.
Pero mientras los burócratas se pelean por el botín del sindicato surgió una verdadera oposición la Celeste y Blanca, conformada por las comisiones internas combativas de Terrabusi, Stani, Pepsico, a la cual se sumaron algunos compañeros de Bagley. Ellos a diferencia de los burócratas realizaron el primer acto contra el cierre de la fabrica el viernes 27 en la puerta de la misma, que fue un éxito y salió por Crónica TV, ayudando a cambiar el estado de ánimo de los compañeros, mostrando que los compañeros de Bagley no están solos. Por eso debemos impedir el cierre de la Bagley y quitarnos de encima a los Daer para recuperar el sindicato y organizar a cada fabrica para una verdadera defensa de nuestros derechos y no los negociados con los patrones. Nuestro mas caluroso saludo y solidaridad activa con la lista Celeste y Blanca.

Ni una fabrica cerrada más

Desde el PTS nos ponemos a disposición de los trabajadores de la Bagley y humildemente llamamos a que confíen en sus propias fuerzas, a que se organicen contra el cierre. Hay que impedir que los Danone la vayan vaciando, hay que impedir que los compañeros se desmoralicen, hay que hacer conocida a nivel nacional la causa de los trabajadores de la Bagley.
Es por eso que llamamos a todas las organizaciones sindicales, sociales, de desocupados, derechos humanos, estudiantiles, políticas, centros culturales y a los vecinos de la fabrica a poner en pie un comité por el NO al Cierre de la Bagley, o como se llame, para rodear de solidaridad a los trabajadores y decirles que no están solos. Debemos redoblar la campaña de denuncia y prepáranos para impedir una nueva tumba en el cementerio de fabricas.

 

PTS - Zona Sur Capital

12-9-04