Al cierre de esta edición, la interna de Kraft realizaba asambleas en los comedores para proponer una campaña de solidaridad con las víctimas del temporal. En el turno noche, cuatro trabajadores se vieron afectados y perdieron gran parte de sus pertenencias. La propuesta que se votó mayoritariamente fue juntar alimentos no perecederos para llevar a Las Tunas y a Virreyes, barrios afectados por la inundación donde viven mayoritariamente obreros. También se votó exigirle a la empresa que otorgue un día de producción para enviarlo a los damnificados de La Plata. La gran mayoría de las trabajadoras se entusiasmó con esta campaña, que ya comenzó a ponerse en movimiento.