El comienzo se demoró para esperar la llegada de una nutrida delegación de docentes de ADOSAC que denunciaron la represión sufrida el viernes pasado a manos de la Federal. En el palco había dirigentes de todos los sectores de la izquierda como Néstor Pitrola, José Montes y Christian Castillo. Se leyó un documento que denunció la impunidad de los autores intelectuales de los hechos, así como la renovada ofensiva de criminalización de la protesta con los casi 5.000 procesados, los presos políticos y las muertes de Mariano Ferreyra, los Qom y los ocupantes del Parque Indoamericano. También hablaron Vanina Kosteki, hermana de Maximiliano y Alberto Santillán, padre de Darío, refiriéndose a los chantajes del gobierno de Néstor Kirchner para que dejaran de denunciar lo que fue un verdadero complot criminal del régimen y el Estado, en el que muchos de sus funcionarios estuvieron involucrados.

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