Sobre la caducidad de Fibertel dictada por el gobierno, PO emitió un comunicado donde declara que la empresa “debe proseguir sus actividades (…) bajo otro gerenciamiento, por ejemplo constituido por un representante de cada partido político reconocido y por representantes de los periodistas, gráficos y administrativos que no integran el círculo de voceros ideológicos de Clarín, ni tampoco del gobierno”.

El Partido Obrero está siendo influenciado frecuentemente por las ideas de Pino Solanas. Primero fue cuando lo siguieron en la “gran campaña de charlas por la deuda externa”, luego el enérgico apoyo al proyecto del Ley por el 82% móvil del Grupo A (aunque, para ser justos, Proyecto Sur, en esto, estuvo un poquitín más a la izquierda, con la propuesta de restitución de los aportes patronales). Pero esta semana, PO pasó los límites, y ha hecho suya una idea cara al solanismo: el control multipartidario de todo.

Proyecto Sur lo refiere siempre al control parlamentario, pero el Partido Obrero, sin bancada, lo simplifica como un “control de los partidos políticos reconocidos”. Lo peor es que este organismo, dice el PO, pondría “un límite a la guerra de piratería”, evitaría “una mayor concentración de los monopolios” y hasta podría castigar “el incumplimiento de las normas por parte de los grupos económicos”. ¡Que tal! Hay que ver los resultados que se logran codo a codo, en un control multipartidario, con los representantes del FPV, el PJ, la UCR, la CC, el PS y el PRO.

M.R