logo PTS

Libertades Democráticas

DOS CONDENAS, TRES ABSOLUCIONES. TODOS IMPUNES

Genocidas condenados a la libertad

Después de 9 meses de juicio oral, y luego de largos 20 años de iniciada la causa, el Tribunal Oral Federal N° 5 de la Capital emitió una nueva provocación en forma de veredicto judicial en lo que se conoce como la causa “jefes” del I Cuerpo de Ejército que actuaron en el ámbito de la Ciudad de Buenos Aires.

PTS

29 de octubre 2009

por Myriam Bregman, abogada, CeProDH

Después de 9 meses de juicio oral, y luego de largos 20 años de iniciada la causa, el Tribunal Oral Federal N° 5 de la Capital emitió una nueva provocación en forma de veredicto judicial en lo que se conoce como la causa “jefes” del I Cuerpo de Ejército que actuaron en el ámbito de la Ciudad de Buenos Aires.

Producto de tantos años de impunidad tal vez muchos no recordaran su nombre, pero Jorge Olivera Róvere fue el segundo de Suárez Mason y el jefe represivo de la Capital Federal1, estando bajo su responsabilidad los centros clandestinos que funcionaron en la ciudad.

El TOF 5 lo condenó a prisión perpetua pero argumentando que la condena no está firme, rechazó el pedido de nuestra querella de que vaya a cárcel común y efectiva y se le permite seguir en libertad hasta que algún día se resuelvan las apelaciones (y difícilmente algún tribunal superior se atreverá a revocar).

También fue sentenciado a vivir en libertad Bernardo José Menéndez2, quién en su condición doble de genocida y abogado se dio el lujo de intervenir en las audiencias en su calidad de letrado.

Ambos fueron beneficiados con numerosas absoluciones (19 y 34 hechos respectivamente).

Las exclamaciones de bronca y dolor irrumpieron en la sala cuando se escucharon las absoluciones totales de Humberto Lobaiza, Teófilo Saa y Felipe Jorge Alespeiti3.

En sus palabras, uno de los genocidas había adelantado este final. Lobaiza, agradeció a los magistrados por cómo condujeron el juicio y deslizó: “Confío que este tribunal hará justicia absolviéndome de culpa y cargo por que no soy culpable de las imputaciones que se me han formulado”.

Como mensaje, se fijó como fecha para dar a conocer los fundamentos de esta sentencia el 10 de diciembre, Día Internacional de los Derechos Humanos y fecha en que fue envenenado Héctor Febrés, en momentos en que estaba siendo juzgado bajo este mismo tribunal.

Un mancha más…

Ante el mismo tribunal, en el juicio al “Turco Julián” (Julio Simón) el fiscal fue Raúl Perotti, quién presenció torturas en La Pampa y sólo se retiró “con una licencia médica” luego de la manifestación de Justicia Ya! en las puertas de Comodoro Py.
En el juicio sobre la “Masacre de Fátima” este tribunal absolvió al represor Miguel Trimarchi porque presentó un certificado médico en el que justificaba que el día de la matanza estaba enfermo. Increíble pero real.

No es sorpresa

Pero si estos jueces siguen allí y prontos a juzgar al Tigre Acosta, a Astiz y la patota de la ESMA es porque se lo ha sostenido en su lugar.

Por su responsabilidad en el caso Febrés, desde Justicia Ya! denunciamos a estos jueces al Consejo de la Magistratura. Como respuesta, la consejera ultra kirchnerista Diana Conti señaló en un comunicado que “planteos inconsistentes de algunos organismos defensores de derechos humanos, que resultan funcionales a las estrategias dilatorias de los represores, resultan inadmisibles”. La denuncia fue rechazada con su firma y la de Kunkel.

Contrariamente, hemos sostenido que estos juicios tal como se están llevando adelante terminan siendo funcionales a la impunidad. También desde el CeProDH en estas páginas hemos insistido desde hace tiempo ya que se está aplicando el Punto Final y la Obediencia Debida de hecho. Esta sentencia lo demuestra, o aun peor… ahora se absuelve también a los jefes.

Prensa

Virginia Rom 113103-4422

Elizabeth Lallana 113674-7357

Marcela Soler115470-9292

Temas relacionados: