logo PTS

Mundo Obrero

Toda crisis es una oportunidad... para la patronal

En la zona norte del Gran Buenos Aires, las patronales de la industria están aprovechando la crisis económica mundial para avanzar sobre las condiciones de trabajo y el salario de los trabajadores.

Víctor Ottoboni

12 de marzo 2009

Sin duda que las noticias que aparecen todos los días en los diarios y la TV de los despidos masivos y cierres de fábricas en los principales países imperialistas, como EE.UU., España, Alemania, Japón, etc. ha generado un clima de incertidumbre y preocupación en la base de los trabajadores. En concreto los trabajadores ya no tienen ni sienten que tengan la posibilidad de conseguir empleo facilmente.

Pero si bien la actual crisis mundial esta afectando los negocios de las empresas de la zona y el país, esto no significa que todas estén bajando la producción y que vayan a una crisis terminal en el corto plazo.

Terrabusi, por ejemplo, esta produciendo hoy por hoy con toda su capacidad. Luego de despedir a cerca de 200 contratados y presionar a varios efectivos con el retiro voluntario, engañaba a los demás trabajadores comunicando oficialmente que iban a despedir a todo un turno. Ahora esta produciendo lo mismo que antes con menos trabajadores.

Golpe a golpe

En Fate, hace unos días un gerente de la empresa dijo en una reunión con varios trabajadores, que “cada crisis es una oportunidad”. Luego que suspendieran todos los miércoles -durante algunas semanas- porque habían bajado las ventas, ahora se preparan para volver a la producción del año anterior. E incluso en algunos sectores importantes para superarla en un 20%. Pero no piensan tomar más trabajadores. Es decir, más trabajo con menos trabajadores, ya que en el conflicto del año pasado hubo 70 trabajadores que quedaron en la calle, y en los últimos meses del año también hubo despidos de varios tercerizados.

En VW Pacheco, luego de las suspensiones masivas durante el verano, ahora han comenzado la producción a niveles del año pasado y están ampliando la planta para fabricar la nueva Pick up.

En la autopartista Pabsa, donde hay una lucha de los trabajadores para organizar y elegir una comisión interna propia, ya que el sindicato del plástico nunca realizó elecciones y los “voceros” que tiene están vendidos a la patronal, la empresa luego de despedir a cerca de la mitad del personal (entre efectivos y contratados) despidió a los referentes que estuvieron y están al frente del proceso de organización y lucha. Y ahora Pabsa se prepara para incorporar a trabajadores de agencia (completamente flexibilizados) para poder cumplir con los compromisos que tiene con VW.

En Dana y Lear de Pacheco, también las patronales despidieron a varios trabajadores, entre los cuales estaban compañeros que se estaban organizando para defender sus derechos. Algunos fueron candidatos para delegado. En estas plantas los sindicatos de la UOM y SMATA acordaron suspensiones masivas con las patronales. Y se encargaron del trabajo sucio, diciéndole a la base de que se venían despidos masivos, buscando aislar a los luchadores despedidos. En Dana la patronal llegó a atrasar un día el pago de una quincena (que representa menos de un día de producción) para generar temor entre los trabajadores, dificultando enfrentar los despidos, para jugarse a congelar los salarios y lograr más productividad.

Ataque a los activistas, más explotación para todos

En estos casos, de importantes empresas de la zona, vemos como las patronales hacen de “cada crisis una oportunidad”. Combinando suspensiones masivas, despidos a los contratados y tercerizados, mientras se juega a liquidar cualquier intento de organización independiente que surja desde abajo, despidiendo a sus referentes más importantes. Y donde existen delegados, internas o seccionales antiburocráticas, intenta quebrarlas o destruirlas, procesando e iniciando juicio de desafueros a las mismas.

Esta claro que las patronales de la industria tienen un plan de generar pánico en la base de las fábricas buscando inmovilizar al conjunto de los trabajadores para que la crisis la suframos nosotros y que para ellos se transforme en una oportunidad para aumentar la explotación, con mayor flexibilidad y congelamiento o rebaja salarial.

Por eso, es criminal la política de la CGT y la CTA que le hacen el favor a estas empresas, y al gobierno pateando las paritarias para junio. Y en algunos gremios (petróleo) ”negociando” congelamiento salarial por estabilidad laboral por un año.

Los trabajadores necesitamos un plan de lucha nacional para romper el chantaje y el engaño patronal, que tiene que comenzar con la unidad de efectivos y contratados, no dejando pasar ningún despido, enfrentado el plan flexibilizador de las patronales. Reparto de las horas de trabajo sin reducción salarial. Paritarias ya para discutir convenio. Y aumento de salario igual a la canasta familiar. Los trabajadores tenemos la fuerza para impedir que la crisis se convierta en millones de nuevos desocupados y en flexibilización laboral. Tenemos que recuperar las comisiones internas y los sindicatos hoy en manos de una burocracia cómplice de las empresas y de esta forma podremos hacer, sin duda, que la crisis la paguen ellos, los capitalistas.

Víctor Ottoboni, Delegado de Fate

Prensa

Virginia Rom 113103-4422

Elizabeth Lallana 113674-7357

Marcela Soler115470-9292

Temas relacionados: