El sabado 31/5 se realizó en Caracas la Primera Conferencia Nacional de la Juventud de Izquierda Revolucionaria - Fracción Trotskista (JIR-FT). En la misma participaron trabajadores de las luchas fabriles más emblemáticas y destacadas que se han desarrollado en el último período, como los trabajadores de SIDOR que vienen de obtener un primer triunfo contra la transnacional Ternium (del grupo argentino Techint), y que le han arrancado la nacionalización al gobierno de Chávez, compañeros de la fábrica Sanitarios Maracay que hace más de un año vienen luchando por la nacionalización de la empresa y el control obrero, y a pesar de los golpes del gobierno nacional continúan en pie de lucha. También participaron compañeros de la petrolera estatal PDVSA, obreros de la Universidad Central de Venezuela (UCV), trabajadores de la administración pública nacional y jóvenes estudiantes de la Universidad que se han destacado en el enfrentamiento con la reacción y el imperialismo como el golpe de abril de 2002 y el paro saboteo con una política independiente del chavismo. La conferencia tuvo como norte la conformación de una nueva liga revolucionaria como parte de la ofensiva por la construcción de un fuerte partido obrero revolucionario en el país.
Las discusiones centrales giraron en torno a la situación internacional, la actual crisis económica que sacude a la principal potencia mundial, Estados Unidos, y su proceso de decadencia, la situación política en Europa donde se observan tendencias a la derechización política, aunque no de manera homogénea; la lucha de clases en varios países, constatando una dinámica de luchas de la clase obrera aunque todavía mayoritariamente como luchas económicas, y no como polo político. También se abordó la discusión sobre la situación en las regiones más convulsionadas como Medio Oriente, donde se concentran las principales tensiones mundiales.

La situación de América Latina ocupó un lugar destacado en los debates por las nuevas tendencias que han emergido desde principios del siglo, con procesos revolucionarios como en Bolivia, jornadas revolucionarias en Argentina o las mismas movilizaciones que derrotaron al golpe proimperialista y todas las tentativas de la reacción interna en Venezuela, entre otras, y que luego han abierto paso al surgimiento de todo tipo de gobiernos, sean de carácter de nacionalismo burgués como Chávez, el llamado “progresismo” en Argentina o el propio gobierno con rasgos de frente popular de Evo Morales.

La Conferencia discutió en profundidad la situación política nacional en base a las Tesis Nacionales presentadas, y que parten del proceso político abierto en el país desde el Caracazo hasta nuestros días. Discutió el actual rumbo del gobierno de Chávez y los síntomas de agotamiento político que comienzan a expresarse, como también los elementos de la crisis de “autoridad” del mismo frente a las masas explotadas que se evidenció en el resultado del referéndum del 2/12/2007 luego de casi 10 años de gobierno. Se debatió sobre las nuevas luchas obreras que se han venido desarrollando y las que comienzan a emerger, transformando a los trabajadores en el sector más dinámico actualmente, como fue el caso de SIDOR; y los procesos, aunque pequeños aún, de experiencia política con Chávez.
En la conferencia partimos de la necesidad de plantear abiertamente una posición política de principios, obrera y socialista frente al gobierno de Chávez, sosteniendo la necesidad de poner en pie un partido obrero revolucionario, independiente del chavismo, sosteniendo que sólo la clase obrera, bajo su propio programa y encabezando al conjunto de los explotados, puede llevar hasta el final la lucha contra la burguesía y el imperialismo, por la liberación nacional y el socialismo.

En este marco se abordó el debate de las estrategias de diferentes organizaciones frente al proceso político actual, algunas corrientes que aún utilizando el lenguaje del trotskismo, se suman al proyecto de Chávez como es el caso de Marea Socialista (ligado al MST argentino) integrante del PSUV. Otras que han venido teniendo una política zigzagueante frente al chavismo como los impulsores de la recién creada Unidad de Izquierda Socialista (ligada a IS de Argentina), que se sumaron a la campaña “por los 10 millones de votos” a favor de Chávez; y pequeños grupos como UST (ligado al PSTU de Brasil), que apoyó en las presidenciales el voto por Chávez y luego llamó a votar por el NO junto a la oposición burguesa en el referendo de la reforma constitucional y llegó al descalabro de considerar progresivas las marchas de la reacción interna estudiantil.

En este sentido la Conferencia Nacional resolvió el lanzamiento de una nueva organización, que adoptó el nombre de Liga de Trabajadores por el Socialismo (LTS), constatando la fusión de trabajadores de diversas tradiciones y experiencias políticas con una camada de jóvenes que en los últimos años han venido peleando a brazo partido por una política independiente de la clase obrera y los sectores explotados y oprimidos. Al mismo tiempo se votó que la nueva organización es parte integrante de la Fracción Trotskista–Cuarta Internacional, por lo que se adoptaron como propias las elaboraciones teórico-políticas y programáticas que se vienen sosteniendo como organización internacional, resolviendo también mantener la JIR como juventud de la LTS.

La naciente LTS no se considera el partido revolucionario de Venezuela, pero sí una liga marxista revolucionaria que lucha consecuentemente por su construcción. Por eso luchamos por forjar toda una camada de trabajadores y estudiantes, como verdaderos estrategas de la revolución, que sepan ligarse a los procesos que se están desarrollando en el país, y en los más agudos que vendrán, sentando las bases para la construcción de un poderoso partido obrero revolucionario, sosteniendo firmemente que sólo un gobierno de los trabajadores y del pueblo pobre, basado en las organizaciones de las masas y defendido por las milicias de los trabajadores, irá hasta el final en la resolución de los graves problemas que aquejan a las masas explotadas de Venezuela y en la lucha por el socialismo.