Nunca sabremos qué respuesta esperaban escuchar exactamente los conductores de TVR al preguntarle a su invitada, Hebe de Bonafini, el sábado 30 de octubre qué opinaba sobre el “rol de la izquierda“. Pero ella no dudó en lanzar una serie de calumnias e insultos dirigidos contra el PO y el PTS.

Las palabras de adhesión que la titular de Madres de Plaza de Mayo había enviado al acto de repudio por el asesinato de Mariano Ferreyra (21/10) fueron tiradas por ella misma al tacho de basura al atacar a las organizaciones que están a la cabeza de todas las movilizaciones para denunciar ese asesinato y exigir castigo a todos los culpables. Exigencia que incluye al burócrata José Pedraza de la Unión Ferroviaria y todos sus cómplices.

Bonafini se olvidó por completo de su propia acusación contra Hugo Moyano, en agosto de 2007, cuando en la Plaza afirmaba que “los sindicatos estaban gobernados por los fachos y eran los que denunciaban a nuestros hijos (...) Así que no me queda duda que Moyano es culpable y responsable de haber participado en la Triple A”.

El fallecimiento del ex-presidente Néstor Kirchner y la respuesta popular que suscitó en Plaza de Mayo le hizo creer a ciertos sectores aliados al gobierno que pueden atacar gratuitamente a quienes venimos dando una lucha consecuente contra la precarización laboral, por el juicio y castigo a todos los genocidas, por las reivindicaciones de los estudiantes y los derechos de las mujeres de forma independiente de cualquier variante patronal.

Gran parte de estas luchas las damos codo a codo con compañeras y compañeros ex detenidos desaparecidos, madres y abuelas de Plaza de Mayo, hijos de desaparecidos y organismos defensores de los derechos humanos. Y justamente esto es posible porque son muchos los luchadores que no fueron cooptados por el doble discurso del kirchnerismo, ni son financiados con enormes subsidios y prebendas por parte del Estado.

Esto mismo nos lleva a ser críticos del rol asumido por parte de los organismos y personalidades como Hebe de Bonafini, que han sido luchadores consecuentes en el pasado, pero lamentablemente hoy se convirtieron en un fuerte pilar donde se apoya este gobierno que nada tiene que ver con los intereses de los trabajadores, por más retórica nacional y popular que utilice. El mismo gobierno que se apoya en personajes nefastos como José Manuel De la Sota, quien dijera allá por 2004 que las “las madres de los desaparecidos debieron cuidar a sus hijos”.

Quienes levantamos las mismas banderas por las que luchaba Mariano Ferreyra podemos vislumbrar qué triste papel seguirá cumpliendo Bonafini, como “pata izquierda” del gobierno en un intento de sostener el doble discurso de “derechos humanos” mientras se recuesta en lo más rancio de la burocracia sindical y en los jefes territoriales de los municipios y las gobernaciones del PJ.

Quizás este ataque hacia las organizaciones de la izquierda clasista sea una primera muestra de cómo piensa encarar la campaña por la reelección presidencial de 2011 que ya están lanzando como parte de la agrupación “Las Cristinas”.

D.S. y V.Z.