Esta semana comenzaron las elecciones de centro de estudiantes. A pesar del paro docente de 72 horas, la conducción de “El Empuje” (que integra La Mella) mantuvo la rutina electoral boicoteando el paro y se negó convocar a una asamblea para que los estudiantes discutiéramos cómo acompañar las medidas de lucha para enfrentar las cesantías, exigir aumentos salariales y terminar con los miles de ad honorem. A pesar de nuestras exigencias y la de cientos de estudiantes que quieren luchar, la conducción levantó la lucha y eligió las urnas.

Pero como si esto fuese poco el jueves pasado cuando desapareció Severo, testigo en la causa de Mariano, la conducción del centro de estudiantes siguió como si nada la rutina electoral y hasta convocó el mismo día de la movilización a la Comisión Directiva del centro para que se presentaran las listas electorales. Una actitud lamentable más para un centro que brilla por su ausencia en cada debate, despolitiza y desorganiza al movimiento estudiantil incluso frente a los ataques de la patota pedracista que sigue actuando impunemente.

Con esta conducción la gestión kirchnerista viene avanzando en las reformas antidemocráticas y progubernamentales en las carreras de Trabajo Social y Comunicación, y no se han frenado las cesantías. Es que se niegan a enfrentar con el movimiento estudiantil organizado desde las bases los avances del Gobierno, el Rectorado y la gestión.

Durante todo el año vimos a la conducción boicotear las asambleas, levantarlas burocráticamente, no respetar sus mandatos, realizar cordones de seguridad para que no hable la Izquierda y hasta atacar físicamente a nuestros militantes.

Pero no sólo desmovilizaron el centro de estudiantes y lo vaciaron, pisoteando la tradición de lucha de Sociales, sino que lo convirtieron en un centro burbuja aislado completamente de la realidad.

Mientras los kirchneristas intentan copar Sociales y transformarlo en el maravilloso mundo de CFK, la conducción de “El Empuje” se queda callada. Mientras los estudiantes discuten los derechos que a la juventud, las mujeres e inmigrantes nos falta conquistar, el centro de estudiantes no dice ni una sola palabra.

A lo que se niegan es a pelear por una perspectiva de alianza con los trabajadores e independiente del Gobierno y la oposición patronal.
Para enfrentar a los kirchneristas y a la actual conducción, conformamos en un plenario abierto “La izquierda al frente”, un frente de la Juventud del PTS y Pan y Rosas, del PO, Prisma y el MAS. Un frente de independencia política muy distinto a los frentes que en otras facultades impulsa el PO con corrientes sojeras o binneristas como Libres del Sur, el MST o el PCR. Un frente progresivo que pelea por un centro organizado de abajo hacia arriba, distinto de los modelos de centro que son una copia de la FUBA (dirigida por el PO y La Mella) que mantiene los estatutos de la Franja Morada, con militantes rentados en bares y fotocopiadoras.
Párrafo aparte merece Izquierda Socialista, que después de apoyar los cacerolazos de derecha y a los gendarmes decidió no conformar este frente de izquierda. Con supuestas críticas por izquierda a la conducción de la FUBA (el “pacto desmovilizador de La Mella-PO”), conducción que integran y que se acuerdan de criticar 11 años después sin una autocrítica, cubren sus posiciones cada vez más lejanas de la independencia política de los trabajadores levantando sus banderas junto a sectores patronales como la Federación Agraria o en apoyo al levantamiento de los gendarmes, los mismos que reprimen y se infiltran en las marchas de trabajadores como lo demostró el Proyecto X.
En Sociales, vamos con La Izquierda al Frente para pelear por un centro que sea aliado incondicional de los trabajadores, y que se juege a que la juventud y los estudiantes de Sociales alcen su voz y se propongan ser un actor protagonista de la realidad. En Sociales, que la izquierda vuelva al Centro es una necesidad.