Mientras el intelectual de Carta Abierta y candidato a diputado nacional por el FPV, Ricardo Foster, afirma que este gobierno puso en agenda a los pueblos originarios, el etnocidio qom persiste y se replica de manera feroz en las provincias kirchneristas de Insfran y Capitanich. Tres jóvenes qom asesinados este último mes en la provincia del Chaco. Maximiliano Pelayo, Mauricio Obregón y ahora Emilia Juana Gómez. A la joven de 15 años la violaron, la golpearon hasta hacerle volar los dientes y la mataron por asfixia con la calza que vestía, atada al cuello, para luego colgarla de un árbol, cerca del cruce de las rutas nacional 16 y provincial 4, en Quitilipi, Chaco. Fue tan brutal el asesinato que hasta los mismos responsables de que sigan sucediendo las muertes como el gobernador, funcionarios e investigadores se vieron obligados a hablar de “odio racial y discriminación”. Cínicos.

Maximiliano, Mauricio y Emilia conformaban la juventud de distintos barrios pobres del Chaco, todos habitados por integrantes de la comunidad qom. En esas casas se sufre del hacinamiento, de la falta de comida, de agua y de trabajo y reina la impunidad. Los integrantes de la comunidad contantemente denuncian los atropellos de la policía y de “criollos” que están vinculados al poder político. Golpizas, requisas en casas, persecución, discriminación y ensañamiento en cada acto. Moneda constante que circula para estos pobladores que además de pobres son originarios.

Hasta el momento ningún caso fue resuelto. Por los testimonios de familiares y vecinos y la movilización inmediata de la comunidad se logró detener a policías que dispararon a modo de ejecución a Maxi y Mauricio y hay un detenido por el asesinato de Emilia. Mientras tanto el ex ministro de seguridad del Chaco, Pedrini, renunció a su cargo para lanzarse de lleno a su campaña electoral, ya que encabeza la lista a diputado nacional por el oficialismo, y Capitanich se muestra preocupado y repudia los hechos aunque la lista de asesinatos en su provincia se agranda mes a mes.