El sábado 21 más de cien trabajadores de la Alimentación se reunieron a discutir y programar los próximos pasos de la campaña electoral. La semana pasada se había recorrido con el boletín de la Bordó la noventa fábricas del gremio, donde sentimos el desprecio que miles de trabajadores tienen por Daer. Hicimos proyecciones y Katy Balaguer recorrió fábricas para hablar con los trabajadores. El sábado hubo compañeros de Kraft, PepsiCo, Bonafide, Stani y de muchas otras fábricas que se sumaron a la Bordó en la campaña electoral a partir de las recorridas y volanteos. Allí, unitariamente, se reafirmó que debemos ganar las calles para pelear por lo que la burocracia no pelea. Es que los empresarios de la COPAL aprovechan que los trabajadores tenemos al frente del STIA a Daer y “ofrecen” un aumento salarial del 15%. Daer adelantó las elecciones para no tener que firmar basura antes de que se vote. Sin embargo, desde hace dos años es la oposición antiburocrática quien toma en sus manos la lucha salarial mientras la dirección del Sindicato mira para otro lado incluso cuando vence el acuerdo paritario. Por eso otra vez marchamos a la COPAL.

Miércoles 25, 7 de la mañana

Bajo una persistente lluvia, más de 400 compañeros cortaron la 9 de Julio. Los trabajadores antiburocráticos de la ex Lista 2 de Stani llevaron una gran bandera que decía “40% de aumento. Salario igual a la canasta familiar. Fuera Daer”. Luego se hizo un acto frente a la sede de la Cámara empresaria. Hablaron todos los candidatos de las internas y agrupaciones opositoras. La repercusión fue enorme. Millones de trabajadores se enteraron por los diarios y los canales de TV que la oposición antiburocrática y clasista exige un aumento salarial del 40%. Ese mismo día Funes de Rioja había salido a quejarse del “costo laboral” de un obrero de la Alimentación, según él de U$S13. La verdad es que una empresa como Kraft factura U$S600 millones y un obrero de categoría inicial no llega a $4.000. Los millonarios de la COPAL lloran su “pobreza” y por eso los obreros de la Alimentación comienzan la lucha, que parte del aumento de salario y se propone conquistar una jornada laboral de 8 horas, 5 días por semana.

En el corte se denunció también el intento de fraude de Daer y cía. En los padrones figuran trabajadores que ya no están en las fábricas porque arreglaron (no son precisamente los despedidos de Kraft y otros conflictos), Daer no entregó los carnets y se empadronó a los trabajadores del propio Sindicato y la Obra Social. Y a los que se les saca el 2%, hasta ahora no los dejan votar. Daer, “nervioso”, por la tarde salió por los medios a tratar de desmentir todas estas denuncias, a decir que es mentira lo que todos saben.
Pero más escandaloso aún es lo que difundieron los medios masivos sobre la fortuna del propio Daer. “¿Por qué la dirección del Sindicato no está acá?” preguntaron algunos periodistas. “Porque viven como gerentes”, respondieron los compañeros. Rodolfo Daer cobró en marzo la friolera de $70.000. En diciembre hay aguinaldo y como a Rodolfo no le alcanza su sueldo para las fiestas ese mes cobró $130.000. Todo pagado con fondos del Sindicato y la Federación, o sea la plata de los obreros que trabajan 6 días por semana por salarios que no cubren la canasta familiar.

Esa es la realidad del gremio de la Alimentación. ¡Y los caraduras de la COPAL dicen que el problema es el “costo laboral”!

¡Fuera Daer!

Un dirigente no puede ganar 20 veces más que un trabajador. Como dice el programa de la Bordó, que los dirigentes ganen lo mismo que un obrero de planta y que se organicen en Asamblea para recuperar todas las conquistas que entregó Daer.

Hay que trabajar ocho horas, cinco días, y los fines de semana que sean para nuestras familias. Basta de empresarios, gerentes y burócratas viviendo como reyes y trabajadores haciendo extras para llegar a fin de mes.

La Bordó se organiza y se propone nuevos objetivos. Se moviliza y denuncia. Lucha por el salario y los derechos de los obreros. Va a nuevas fábricas y se extiende.

Sumemos a cientos de compañeros en este tramo final de la campaña. La fuerza está de nuestro lado. Del suyo el aparato, los favores, la corrupción y la entrega.

Hay que conseguir cientos de fiscales para parar el fraude. Y movilizados llegar a todo el gremio, haciendo sentir en cada fábrica, de la más grande a la más pequeña, el grito La Bordó y los obreros de la Alimentación. ¡Fuera Daer!