En el impasse de las medidas de fuerza que lleva acabo el Frente de Gremios Estatales y la Multisectorial en reclamo por la recomposición salarial de los trabajadores, se realizaron las elecciones de delegados en varias reparticiones de los trabajadores municipales de San Salvador del combativo S.E.O.M. Entrevistamos a Alejandro, nuevo delegado electo.

¿Fue amplia la participación de los compañeros?

Si, por que estando en el medio de un conflicto salarial, los trabajadores expresaron esa necesidad de lucha, más donde el gobierno viene esquivando una situación compleja, en que la inflación se viene devorando los salarios, sumado a una enorme masa de trabajadores en negro y miles de desocupados.

El SEOM además es una de los sindicatos más fuertes y con tradición de lucha. Lo que se ratificó en estas elección fue es la convicción de seguir luchando.

¿Uds. en el sector de recolección se presentaron a la elección y ganaron?

Sí, pero no fue tan simple, por una situación más particular, donde los trabajadores de recolección de Alto Comedero no estaban organizados, nunca tuvieron delegados. Además es un sector muy sensible por el servicio que brinda, donde los trabajadores muchas veces no son reconocidos por una tarea que demanda mucho esfuerzo y sacrificio. El obrero de recolección vive permanentemente subestimado por las autoridades y funcionarios.

Alto Comedero es considerado como un barrio periférico de San Salvador de Jujuy, pero en realidad es casi una ciudad, donde vive el grueso de los trabajadores que se sigue expandiendo, pero donde el gobierno y el municipio apenas brindan los servicios elementales.

¿En que medida influyó la importante lucha de los trabajadores en negro de 2005?

Esta elección coincidió con el ingreso a este sector de nuevos trabajadores jornalizados, en su mayoría jóvenes, que venían de un proceso de lucha junto al Sindicato por el pase a planta permanente en 2005. Se trata de los trabajadores en negro que tenía el municipio, que más tarde se haría expansiva cuando formaron parte de la coordinadora provincial de trabajadores en negro, junto a otros trabajadores de la administración pública.

Todo esto, más el debate, la unidad y el compañerismo, llevo a que busquemos tener delegados de base y presentar una lista.

¿Cómo se armó esa lista?

Mira fue un debate, pero como todos teníamos en claro un aspecto central el de la democracia obrera, se convocaron a varias asambleas para que de allí salieran los compañeros más representativos como candidatos.

Antes, cuando había algún problema, nos autoconvocábamos en asambleas, y ahora se quedó de acuerdo que sea nuestro método, donde todo se decida en asamblea. Esa fue la primera premisa que se marcó para los candidatos, como la pelea por un salario igual a la canasta familiar y móvil. Pero además se dejó abierta la posibilidad a que cualquier compañero que quiera postularse presente otra lista, ya que la convocatoria del sindicato era para elegir delegados de todo el edificio.

Como se vino posponiendo las elecciones por las medidas de fuerza, casi a último momento del cierre nos informaron de los plazos de presentación de listas. Igualmente logramos juntar los avales y presentar la lista de los obreros de recolección.

Aunque había una propuesta de los anteriores delegados del edificio de armar una lista única que luego no se concretó, presentamos nuestra lista y el sindicato la suya. Finalmente, alcanzamos casi el 60% de los votos efectivos, conquistando la representación del edificio. Para ello fue muy importante lograr el apoyo de los trabajadores administrativos del edificio. Fue un gran triunfo.

¿Cual son las perspectivas que tienen?

En principio, de organizarnos en nuestro sector y defender esta conquista. Desde ahí queremos aportar a la lucha que lleva el SEOM por el aumento salarial, y los estatales de Jujuy que acaban de recibir una propuesta de aumento de las asignaciones familiares y un medio aguinaldo, que es un intento de cambiar el eje de la discusión del verdadero reclamo del aumento salarial.

Pero las tareas además son muchas, por que son años de postergación en la que nos dejaron las sucesivas gestiones municipales del PJ y la UCR. No tenemos un espacio físico, baños dignos, guantes para levantar la basura, ni botiquines, ni un jabón.

Sabemos que con más participación de los compañeros y con verdaderos delegados de base, podremos avanzar en recuperar lo perdido. Este ha sido un importante paso que tenemos que defender para que nuevos sectores de trabajadores se organicen.