El pasado 4 de abril, luego de una intensa jornada a 7 años del asesinato de Fuentealba, la UNCo fue escenario de una conmovedora charla con Ramón Cortés, uno de los trabajadores de Las Heras condenados a perpetua.

La charla, con más de 250 personas, se convirtió en un gran hecho político. El aula rebalsó, muchos escucharon desde los pasillos. Se llenó de estudiantes de la Universidad. A la convocatoria del Centro de Estudiantes de Humanidades (CEHuma) asistieron docentes en huelga de ATEN, obreros en lucha de la Cerámica Neuquén (que donaron su fondo de huelga a Cortés) junto a Zanon y el Sindicato Ceramista, y la Junta Interna del Hospital Castro Rendón con una nutrida delegación. Hubo jóvenes precarizados de distintas empresas y estudiantes secundarios. Saludaron la charla desde la banca del FIT la diputada Angélica Lagunas y Raúl Godoy (diputado mandato cumplido).

Desde “La Imaginación al Poder” (conducción del CEHuma) recorrimos los cursos, sacamos miles de volantes y afiches: “que no te la cuente Cristina, vení a escuchar a los condenados”. Conseguimos que adhieran 13 Centros de Estudiantes de la Universidad y la Federación del Comahue (FUC), decenas de docentes, cátedras enteras y el propio Decano de Humanidades, Barreiro. Las Madres de Plaza de Mayo (filial Neuquén) enviaron un saludo que fue aplaudido por todo el público.
Cortés estremeció a los presentes relatando las torturas sufridas desde 2006: nadie pudo salir de la charla indiferente. Desafió a la presidenta CFK, quien respaldó el fallo acusando a los petroleros de asesinos. Pero el único “crimen” que cometieron los trabajadores fue enfrentar a las petroleras imperialistas exigiendo el fin de la precarización laboral y del impuesto al salario. La condena es, justamente, un guiño a las petroleras. El año pasado vimos en Neuquén el poder que tienen, cuando los K y el MPN impusieron el acuerdo con la yanqui Chevron a sangre y fuego. Hoy, mientras pagan miles de millones de dólares a la Repsol, en la provincia los docentes siguen en huelga porque Sapag no ofreció ni un peso de aumento. El fallo busca asustar a los trabajadores y la juventud para que no enfrentemos el ajuste.

La actividad fue un éxito y concluyó con el compromiso de seguir impulsando la campaña por la absolución, participando de la jornada de paro del 10 de abril: allí estuvimos, forjando la unidad obrera-estudiantil en las calles.