En esta tercer semana ya llegamos a 60 colegios tomados, con nuevas ocupaciones, entre ellas la Técnica 32. El miércoles 3 se realizó una reunión convocada por la jueza Liberatori, de la que participaron decenas de representantes por colegio, funcionarios y el mismo Bullrich, quien reiteró que no va a dialogar con los colegios tomados. La jueza exhortó a levantar las tomas, y convocó a una nueva reunión el viernes. La burocracia de UTE-CTERA, que se hizo presente, se niega a llamar a un paro, mientras que las burocracias de AMET y UDA negocian por atrás con el macrismo para levantar las tomas.

En las técnicas no dan respuestas

Las reformas empezaron por los colegios técnicos. En los diseños curriculares presentados por el PRO, se rebajaban horas de materias técnicas, y se sumaban materias humanísticas. Al aumentarse la cantidad de horas totales, el turno noche estaría en riesgo, ya que los pibes que trabajan no pueden entrar más temprano, o salir a la madrugada. Sumar un año tampoco es aceptable: tener que cursar 7 años haría que más pibes dejen la escuela.

Por estos días están circulando nuevas currículas en las que se nos devolverían horas de materias específicas, pero no hay ninguna garantía. Además, nadie nos respondió, después de meses de lucha, qué serían las 216 horas de “Prácticas Profesionalizantes”, que pueden ser aprovechadas por las empresas para que hagamos pasantías gratuitas o precarizadas. Por otra parte, fueron funcionarios porteños los que nos dijeron que las escuelas no cuentan con la infraestructura para garantizar las horas de cursada que se sumarían.

La única opción: la suspensión

No podemos permitir que pase esta reforma inconsulta. El de las técnicas es un caso testigo, después vienen las reformas en el resto de los colegios. Es por eso que tenemos que luchar hasta conseguir la suspensión. Los estudiantes y docentes queremos debatir durante todo el 2013, y decidir democráticamente sobre nuestros planes de estudio. Queremos una educación pública, laica, gratuita y científica, que no esté al servicio de las ganancias de los empresarios, sino de las necesidades del pueblo trabajador.

Bullrich, Sileoni y el Consejo Federal son responsables

El gobierno de Macri es la cara visible, pero la reforma se hace para homologar los planes de estudio según la Ley de Educación Técnico – Profesional, votada por el kirchnerismo y la oposición en 2005, y distintas resoluciones del Consejo Federal de Educación, presidido por el Ministro de Educación Nacional Sileoni. Esa ley, al igual que la Ley de Educación Nacional de 2006 (que guiará las reformas en el resto de los colegios), mantiene la herencia menemista en la educación: un sistema educativo descentralizado y abierto a la injerencia de las empresas privadas. En los normales, bachilleres, comerciales y artísticos, quitarían especializaciones, avanzando en lo que no pudo destruir la Ley Federal de Educación que fue resistida en Capital en los ‘90. De esta manera, se favorece el avance de institutos de formación privados que ocupan el lugar de las especialidades. A su vez, fue Cristina la que impulsó el decreto 1.374 que establece un régimen de pasantías que fomenta la precarización laboral. La independencia política frente a los dos gobiernos, fortalece al movimiento. Es por eso que hay que reclamarles a ambos la suspensión YA.

Fortalecer la coordinación

Para conquistar la suspensión hace falta la unidad en la lucha, sostener las tomas y masificar, junto a otros sectores como terciarios que se sumaron a las tomas, universitarios y docentes. Por eso, a propuesta nuestra, se acordó la realización de la movilización unitaria de este jueves 4/10. Desde el Ministerio de Educación de la Nación, con un acto, hasta el de Ciudad.

El kirchnerismo y el Estado pretenden llevar nuestro movimiento detrás de reuniones con la justicia, y desmovilizar. No podemos permitirlo. Llamamos a profundizar las tomas y las movilizaciones exigiendo a Bullrich y a Sileoni la suspensión.

Hay que profundizar la organización desde abajo, con mandatos de base, más participación y coordinación. En las reuniones de la CEB (Coordinadora de Estudiantes de Base) y la ATA (Asamblea de Técnicos Autoconvocados), todavía no se reúne el conjunto de los colegios en lucha. Es el momento de fortalecer entre todos una gran coordinadora unificada, en la que se puedan expresar todos los colegios y las agrupaciones que defiendan la lucha. Que tome sus decisiones en base a los mandatos de los cursos y asambleas, de manera independiente de las autoridades, los gobiernos y el Estado. Esta pelea la venimos planteando desde la Red de Agrupaciones de Estudiantes Secundarios Manuel Gutiérrez (Juventud del PTS e independientes).