La guerra imperialista contra Irak es un tema muy caro para el pueblo argentino. El 24 de marzo de 1976 las fuerzas armadas tomaban el poder para inaugurar un nuevo ciclo económico al servicio de la burguesía financiera imperialista, sus empresas y sus socios locales. Para eso se hizo necesario liquidar físicamente a toda una generación de jóvenes luchadores obreros y estudiantes que se habían forjado en la resistencia peronista y dado un salto en calidad revolucionaria a partir del Cordobazo.
En treinta años, la deuda externa pasó de 4.000 millones a 150.000 millones de dólares. La desocupación, del 5% al 22%. Los salarios de los trabajadores en 1975 equivalían el 50% de la renta nacional, y hoy no superan el 17%. Una política de saqueo y rapiña que llevó que la mayoría de las empresas del Estado terminara en manos de pulpos imperialistas. Los yanquis fueron los partícipes necesarios del golpe del 24 de marzo. Y sus directos beneficiarios.

La marcha contra la guerra imperialista del último 15 de febrero fue la movilización internacionalista más importante desde aquella del 11 de septiembre de 1973 contra el golpe yanqui-pinochetista en Chile, protagonizada entonces por quienes murieron en las mazmorras de la dictadura de Videla y Massera. Como planteó el delegado del PTS en la primera reunión de fuerzas sociales y políticas para preparar la marcha de repudio al golpe, “estamos seguros dónde estaría hoy aquella generación desaparecida: marchando por miles para enfrentar esta guerra imperialista que puede cambiar el curso de la historia”. La principal consigna con que más de cincuenta organizaciones convocamos a marchar este 24 de marzo no podía ser otra que: ¡No a la guerra imperialista contra Irak!, junto a la denuncia al hambre, la represión y la impunidad del ilegítimo gobierno de Duhalde.

Este lunes 24 de marzo Buenos Aires se debe convertir en un torrente de decenas de miles de manifestantes marchando del Congreso a la Plaza de Mayo, en una multitudinaria jornada antiimperialista, superior a las realizadas los 15 de febrero y marzo y el jueves 20, apenas iniciados los bombardeos sobre Bagdad. ¡Abajo la neutralidad trucha de Duhalde y Ruckauf! Miles en las calles por la derrota militar de los yanquis e ingleses genocidas; por el triunfo de Irak que significaría el triunfo de todos los pueblos del mundo sojuzgados por el imperialismo.

Este lunes 24 marchemos junto a las fábricas ocupadas por sus trabajadores, asambleas y movimientos juveniles desde Brukman (Av. Jujuy al 500) a las 17 hs.