La empresa Aros Kim, se hará cargo de la ex-Mahle. En los próximos días se firmaría el traspaso.

La enorme resistencia de las 149 familias obreras en más de 7 meses de ocupación logró lo que ninguno de los partidos patronales que “se sacaron la foto” durante las elecciones, ninguno de los Ministros, ni los dirigentes traidores de la UOM. Todo lo que se haya conseguido ha sido producto de su lucha y resistencia.

Sin embargo, esta sensación de alegría no debe hacer relajar los músculos, ya que comienza una nueva etapa de la lucha.
 
Todos adentro y respeto a todos los derechos: ninguna discriminación
En el propio comunicado, Aros Kim asegura que empleará a 150 operarios, pero se reserva el derecho de decidir quiénes serán. Es decir, que las 149 familias que simbolizaron la lucha contra los cierres y los despidos en la región, aún corren el riesgo de ser castigados y seguir en la calle.

La mejor forma de evitar cualquier discriminación es oponerse unificadamente a la negociación individual que quieren imponer la nueva patronal, el Ministerio de Trabajo y la UOM.

Se torna más necesario que nunca mantenerse alerta, organizados, en asamblea permanente y votando un plan de lucha serio para garantizar el ingreso de los 149 compañeros que siguieron en la lucha sin discriminación de ningún tipo, reconociendo todos los derechos adquiridos previamente al cierre de Mahle y garantizando todos los derechos gremiales.

Confiar en la fuerza y solidaridad de los trabajadores

Lamentablemente la dirección del conflicto está lejos de plantear esta perspectiva y se mantiene en la misma línea que Ciciliani, la Viceministra de Trabajo “socialista”.

Ya en las últimas semanas hicieron todos los intentos posibles para levantar el acampe frente a la gobernación provincial por pedido expreso de Ciciliani.

El 16, también por pedido de la Viceministra, la Comisión Interna planteó abandonar la ocupación de la planta, cosa que lamentablemente se hizo.
En la mañana del 18, uno se sus miembros dijo: “sabemos que las cosas no van a ser como antes. Vamos a tener que hacer un gran esfuerzo para que esto salga adelante. Si alguno de nosotros quedamos afuera habrá que hacer un esfuerzo”. De este modo pretenden convencer a los compañeros que la única opción es colaborar con la nueva patronal (traducido al lenguaje empresario, esto significa congelar salarios, firmar la “paz social”, aplicar polifuncionalidad, etc.) y resignar los puestos de trabajo después de más de 7 meses de resistencia.

Efectivamente, si los compañeros abandonan todas las medidas de lucha, empezando por la ocupación de la planta, y tan sólo se les propone esperar en sus casas hasta que el nuevo empresario los llame de a uno para “analizar caso por caso”, se le deja el terreno libre para que se deshaga de cuantos quiera.

Por el contrario desde el PTS, que hemos apoyado la lucha desde el primer día de modo incondicional, creemos que hay que seguir organizado y utilizar la próxima asamblea para votar un plan de lucha que garantice los puestos de los 149 compañeros que se mantienen hasta el final, sin ninguna discriminación y garantizándole todos sus derechos.

Un plenario regional de trabajadores y delegados de base

 La lucha de los trabajadores de la ex Mahle ha sido un símbolo para miles de trabajadores. La solidaridad de la población por esta lucha ha sido enorme. Su triunfo es importante para el conjunto de los trabajadores.
Pero también hay otros sectores en lucha. Los lecheros, los no docentes de las escuelas, y ni que hablar de los más de 24 mil docentes que votaron salir a la lucha contra su patrón “socialista” Binner.

La necesidad de unir todas las luchas se impone por los propios hechos.
La CTA Rosario y de Villa Constitución hace casi un año prometieron convocar un plenario de trabajadores para que la crisis no la paguen los trabajadores. Pero en la provincia ya pasaron 50 mil despidos, suspensiones y cierre de fábricas y aún no han convocado dicho plenario.

AMSAFE Rosario que cuenta con la voluntad de miles de maestros rosarinos que decidieron salir a la lucha, tienen la responsabilidad de convocar a un plenario unificado de todos los gremios de la CTA abierto a todos los sectores en lucha para votar un plan de lucha unificado y enfrentar al gobierno y a las patronales.

Los sectores de la izquierda que comparten la dirección de sindicatos como es el caso de PO en AMSAFE tienen una doble responsabilidad, ya que hasta hoy no han presentado ni una sola moción en el gremio para votar aunque sea, una jornada de lucha común con los obreros de Mahle.
Hay que impulsar un congreso de bases y un plan de lucha común por Mahle, Paraná Metal, por salario y para que la crisis la paguen los capitalistas.