Desde hace tiempo Patricio Echegaray del Partido Comunista viene sosteniendo que “hace falta una política de alianzas que vaya de la izquierda al centro”. Este viejo postulado de colaboración de clases que siempre defendieron los “comunistas” se ha concretado con la alianza que IU ha formalizado con el “Partido Socialista” para las próximas elecciones en la provincia de Bs. As. Por si quedara alguna duda (y para adelantarnos a argumentos del tipo de los del MST) de que estamos ante un clarísimo giro a la derecha de IU, y no de un supuesto ‘giro a la izquierda’ del PS (aún si este fuera puro oportunismo) digamos que los “socialistas” van junto a la podrida UCR en varios distritos de la provincia, como en Chascomús, Mercedes o Pergamino.
En anteriores oportunidades ya hemos hecho referencia a la historia antiobrera y gorila del PS. Los “socialistas” apoyaron el golpe proyanky contra Perón en el ‘55, aportaron intendentes y embajadores a la dictadura de Videla y más recientemente integraron la Alianza votando y apoyando al gobierno de De la Rúa, Santibañes, López Murphy y Cavallo.
Pero hoy IU no sólo colabora para que el PS “blanquee” su negra historia, sino que su desenfrenado electoralismo los lleva a levantar politiqueros de comité y carreristas de todo tipo con el solo objetivo de competir con la amplia oferta del centroizquierda provincial. No sólo encumbra en lo más alto de su lista, como candidato a gobernador, a Jorge Rivas, quien debe su actual banca de diputados a la Alianza; sino que otros “socialistas” de la vieja política también ocupan otras importantes candidaturas. Tal es el caso del candidato a intendente por la ciudad de La Plata.
El caso Stegmayer
Henry Stegmayer, candidato a intendente de La Plata por IU-PS, se presenta como “El cambio”, pero no es más que uno de los tantos “izquierdistas” del Frepaso que ingresaron como diputados provinciales en las elecciones de 1997 y que en el 2001, cuando el barco se hundía, “saltó” al ARI, aunque por entonces vio fracasado su intento de ser reelegido.
‘El Henry’, como suelen llamarlo sus propios compañeros, junto a los Mosquera hoy aliado a D’Elía y los Sigal (convertido en un fanático kirchnerista), fue parte del bloque del Frepaso provincial que pasó a presidir la cámara de diputados de la legislatura de Bs. As., cargo que durante dos años ocupó el propio Mosquera. Desde ese estratégico “puesto de lucha” no sólo administraron la famosa “cajita feliz” de la legislatura bonaerense (alrededor de 90 millones por año “pa’ lo que guste gastar”) sino que terminaron conviviendo pacíficamente con el entonces gobernador Duhalde quien nunca vio perjudicado, bajo la conducción de la cámara por parte de los frepasistas, ninguno de sus reaccionarios proyectos de ley.
Stegmayer fue, además, durante muchos años uno de los principales dirigentes de la Mesa Ejecutiva del MNR (brazo universitario del PS) que en la asamblea universitaria del año ’96 votaron, junto a sus socios de la Franja Morada, el cambio de los estatutos de la UNLP para adecuar a ésta a la Ley de Educación Superior. Aquella tristemente célebre asamblea tuvo que funcionar bajo la custodia de la policía dirigida en aquel entonces por Klodczyk mientras cientos de estudiantes eran reprimidos y encarcelados.
Ahora Izquierda Unida permite que este representante de la vieja política hoy se presente como “El cambio” ante los ojos de los luchadores y de los miles que a partir del 2001 salieron a las calles y se organizaron al grito de “que se vayan todos”. Por el contrario, los Stegmayer, “socialistas del régimen”, son parte de una casta política que vive llena de privilegios cuando los trabajadores y el pueblo de la provincia de Bs. As. y del país fuimos hundidos por los distintos gobiernos en la miseria y la desocupación.
Que los diputados ganen lo mismo que un docente
Los trabajadores que integramos las listas del PTS participamos de estas elecciones provinciales para decirle a millones que hay que terminar con los privilegios de esta casta política. Junto con luchar por un movimiento político de trabajadores, planteamos la abolición de la cámara de senadores, la constitución de una cámara única y que los legisladores ganen lo mismo que un docente de doble turno y sean revocables por los propios electores. Casualmente esta demanda democrática elemental no figura en el planteo de la alianza IU-PS.
Por más que la dirección del MST quiera tapar el sol con un dedo y trate de convencer a sus militantes diciendo que la alianza electoral con el PS es un acuerdo táctico (con la misma definición, el acuerdo con el PC ya lleva más de una década de existencia) el PS es un partido de arribistas aliados por profundos lazos a la burguesía que nada tiene que ver con la clase obrera.
IU y los “acuerdos transversales”
La anulación de las leyes de Obediencia Debida y Punto Final, sancionada por la Cámara de Diputados y Senadores sirvió de escenario para que se lavaran la cara personajes funestos de los partidos patronales. La “renovación” política kirchnerista apeló en esa votación a sujetos del tipo de Díaz Bancalari, Oraldo Britos, Eduardo Caamaño, Cafiero, los diputados menemistas y un largo etcétera. Un baño de “agua bendita” para quienes fueron cómplices de la impunidad y que hasta no hace mucho debían esconderse de la furia de la gente. Lamentablemente Izquierda Unida se prestó al juego retirando su proyecto original en pos de acordar con el PJ. Así el MST y el PC apoyaron sin vacilar un pacto por el cual se eliminó del proyecto a los indultos y firmaron junto al ARI, el PJ, los restos del Frepaso, los menemistas, duhaldistas, etc., el proyecto de Díaz Bancalari. Lo mínimo que podían haber hecho era naturalmente defender el propio proyecto de ley y no llamar a confiar en “acuerdos transversales” con los diputados y senadores del PJ. De su mano no vendrá la cárcel a todos los genocidas.
El diputado de Autodeterminación y Libertad Luis Zamora, denunció la complicidad de los partidos de la impunidad pero sin embargo no planteó una propuesta concreta y efectiva –como ser la elección directa de los jueces por el voto popular y juicios por jurados- para que no suceda lo que él mismo alertó: una nueva y gran decepción popular donde a través de decenas de vericuetos judiciales se termine dejando impunes a la mayoría de los genocidas. El único camino para lograrlo sigue siendo el de la movilización independiente. Llamamos a Luis Zamora, a los diputados y legisladores de Autodeterminación y Libertad así como a IU a impulsar esta lucha y la movilización de los trabajadores y el pueblo hasta lograr el objetivo: cárcel a los genocidas.
*Delegado de ATE- IOMA y candidato a Intendente de La Plata por el PTS






Desde hace tiempo Patricio Echegaray del Partido Comunista viene sosteniendo que “hace falta una política de alianzas que vaya de la izquierda al centro”. Este viejo postulado de colaboración de clases que siempre defendieron los “comunistas” se ha concretado con la alianza que IU ha formalizado con el “Partido Socialista” para las próximas elecciones en la provincia de Bs. As. Por si quedara alguna duda (y para adelantarnos a argumentos del tipo de los del MST) de que estamos ante un clarísimo giro a la derecha de IU, y no de un supuesto ‘giro a la izquierda’ del PS (aún si este fuera puro oportunismo) digamos que los “socialistas” van junto a la podrida UCR en varios distritos de la provincia, como en Chascomús, Mercedes o Pergamino.
En anteriores oportunidades ya hemos hecho referencia a la historia antiobrera y gorila del PS. Los “socialistas” apoyaron el golpe proyanky contra Perón en el ‘55, aportaron intendentes y embajadores a la dictadura de Videla y más recientemente integraron la Alianza votando y apoyando al gobierno de De la Rúa, Santibañes, López Murphy y Cavallo.
Pero hoy IU no sólo colabora para que el PS “blanquee” su negra historia, sino que su desenfrenado electoralismo los lleva a levantar politiqueros de comité y carreristas de todo tipo con el solo objetivo de competir con la amplia oferta del centroizquierda provincial. No sólo encumbra en lo más alto de su lista, como candidato a gobernador, a Jorge Rivas, quien debe su actual banca de diputados a la Alianza; sino que otros “socialistas” de la vieja política también ocupan otras importantes candidaturas. Tal es el caso del candidato a intendente por la ciudad de La Plata.

El caso Stegmayer

Henry Stegmayer, candidato a intendente de La Plata por IU-PS, se presenta como “El cambio”, pero no es más que uno de los tantos “izquierdistas” del Frepaso que ingresaron como diputados provinciales en las elecciones de 1997 y que en el 2001, cuando el barco se hundía, “saltó” al ARI, aunque por entonces vio fracasado su intento de ser reelegido.
‘El Henry’, como suelen llamarlo sus propios compañeros, junto a los Mosquera hoy aliado a D’Elía y los Sigal (convertido en un fanático kirchnerista), fue parte del bloque del Frepaso provincial que pasó a presidir la cámara de diputados de la legislatura de Bs. As., cargo que durante dos años ocupó el propio Mosquera. Desde ese estratégico “puesto de lucha” no sólo administraron la famosa “cajita feliz” de la legislatura bonaerense (alrededor de 90 millones por año “pa’ lo que guste gastar”) sino que terminaron conviviendo pacíficamente con el entonces gobernador Duhalde quien nunca vio perjudicado, bajo la conducción de la cámara por parte de los frepasistas, ninguno de sus reaccionarios proyectos de ley.
Stegmayer fue, además, durante muchos años uno de los principales dirigentes de la Mesa Ejecutiva del MNR (brazo universitario del PS) que en la asamblea universitaria del año ’96 votaron, junto a sus socios de la Franja Morada, el cambio de los estatutos de la UNLP para adecuar a ésta a la Ley de Educación Superior. Aquella tristemente célebre asamblea tuvo que funcionar bajo la custodia de la policía dirigida en aquel entonces por Klodczyk mientras cientos de estudiantes eran reprimidos y encarcelados.
Ahora Izquierda Unida permite que este representante de la vieja política hoy se presente como “El cambio” ante los ojos de los luchadores y de los miles que a partir del 2001 salieron a las calles y se organizaron al grito de “que se vayan todos”. Por el contrario, los Stegmayer, “socialistas del régimen”, son parte de una casta política que vive llena de privilegios cuando los trabajadores y el pueblo de la provincia de Bs. As. y del país fuimos hundidos por los distintos gobiernos en la miseria y la desocupación.

Que los diputados ganen lo mismo que un docente

Los trabajadores que integramos las listas del PTS participamos de estas elecciones provinciales para decirle a millones que hay que terminar con los privilegios de esta casta política. Junto con luchar por un movimiento político de trabajadores, planteamos la abolición de la cámara de senadores, la constitución de una cámara única y que los legisladores ganen lo mismo que un docente de doble turno y sean revocables por los propios electores. Casualmente esta demanda democrática elemental no figura en el planteo de la alianza IU-PS.
Por más que la dirección del MST quiera tapar el sol con un dedo y trate de convencer a sus militantes diciendo que la alianza electoral con el PS es un acuerdo táctico (con la misma definición, el acuerdo con el PC ya lleva más de una década de existencia) el PS es un partido de arribistas aliados por profundos lazos a la burguesía que nada tiene que ver con la clase obrera.

IU y los “acuerdos transversales”

La anulación de las leyes de Obediencia Debida y Punto Final, sancionada por la Cámara de Diputados y Senadores sirvió de escenario para que se lavaran la cara personajes funestos de los partidos patronales. La “renovación” política kirchnerista apeló en esa votación a sujetos del tipo de Díaz Bancalari, Oraldo Britos, Eduardo Caamaño, Cafiero, los diputados menemistas y un largo etcétera. Un baño de “agua bendita” para quienes fueron cómplices de la impunidad y que hasta no hace mucho debían esconderse de la furia de la gente. Lamentablemente Izquierda Unida se prestó al juego retirando su proyecto original en pos de acordar con el PJ. Así el MST y el PC apoyaron sin vacilar un pacto por el cual se eliminó del proyecto a los indultos y firmaron junto al ARI, el PJ, los restos del Frepaso, los menemistas, duhaldistas, etc., el proyecto de Díaz Bancalari. Lo mínimo que podían haber hecho era naturalmente defender el propio proyecto de ley y no llamar a confiar en “acuerdos transversales” con los diputados y senadores del PJ. De su mano no vendrá la cárcel a todos los genocidas.
El diputado de Autodeterminación y Libertad Luis Zamora, denunció la complicidad de los partidos de la impunidad pero sin embargo no planteó una propuesta concreta y efectiva –como ser la elección directa de los jueces por el voto popular y juicios por jurados- para que no suceda lo que él mismo alertó: una nueva y gran decepción popular donde a través de decenas de vericuetos judiciales se termine dejando impunes a la mayoría de los genocidas. El único camino para lograrlo sigue siendo el de la movilización independiente. Llamamos a Luis Zamora, a los diputados y legisladores de Autodeterminación y Libertad así como a IU a impulsar esta lucha y la movilización de los trabajadores y el pueblo hasta lograr el objetivo: cárcel a los genocidas.



 *Delegado de ATE- IOMA y candidato a Intendente de La Plata por el PTS