EN LA calle se escuchan otras voces. En la calle y en las escuelas las opiniones y la bronca brotan, más cuando Cristina Kirchner dice que los docentes “trabajan cuatro horas y tienen tres meses de vacaciones” y pone un tope por decreto a los aumentos de sueldo para maestros y maestras. En el Normal N° 5 de Barracas escuchamos esas otras voces que el Gobierno no escucha.

Primero, la indignación frente a los dichos de Cristina. Todos comentan que los docentes de sus hijos viven otra realidad que la que se dice en discursos por televisión: “Yo veo que los maestros trabajan, se preocupan, no es que trabajan cuatro horas y se van a su casa. Siguen trabajando, corrigen pruebas, cuadernos, notas”.
Preguntamos a los padres qué opinan de los sueldos de los docentes. La indignación vuelve a aparecer: “Me parece que es parte de un doble discurso del gobierno. Dice que apuesta todo a la educación y los sueldos no están acordes a las declaraciones de la Presidenta. Si queremos apostar a una educación de calidad los docentes tendrían que ser uno de los oficios mejor pagos del país”.
No faltan las reflexiones y la bronca sobre el aumento del 100% de sueldo de los diputados y senadores: “Me parece asqueroso que haya carta blanca para los diputados y senadores para aumentarse los sueldos”.

“¡Y ellos no hacen nada! ¿Por qué se aumentan el sueldo? Que los aumenten acá, que aumenten en la escuela, en hospitales, a los trabajadores de verdad, ellos se aumentan pero no hacen nada”.

“Es injusto que se discuta un salario docente para Capital y otro para provincia. Tendría que ser nacional. Y en realidad $2.800 no es nada. $3.000 tampoco. Tendría que ser un poquito más. Yo estoy a favor del gobierno nacional, pero antes habían dicho que no había tope para el salario y ya les están poniendo un tope de movida hasta $2.800. Es horrible”.

Preguntamos qué opinan de las medidas de los docentes para reclamar por sus derechos. Las opiniones son claras: “Yo no creo que los docentes discutan los salarios a propósito a principio de clases. Como trabajadores me parece válida la medida de fuerza. Me parece que la pelota la tiene el gobierno. Es justo el reclamo. Se tienen que dejar de joder y dar el aumento”.
“Soy empleado del Gobierno de la Ciudad. Cuando se acaban las negociaciones no queda otra que la medida de fuerza. La de los maestros es esta, igual que cuando nosotros paramos, no hay otra. Cuando no sos escuchado, cuando las negociaciones no son tales, no queda otra que la medida de fuerza”.

Federico, docente del colegio e integrante de la Corriente 9 de Abril sumó su opinión: “El tema es que van por la escuela pública. Todos los docentes y padres, por lo menos de mi escuela, vamos a salir a defender estos derechos. Los docentes tienen bronca, mucha rabia con los dichos de Cristina porque lejos estamos de laburar cuatro horas y esa cantidad de meses de vacaciones. Además nuestro salario es una miseria”.

“No es que un diputado cobre lo mismo que un docente. Los docentes queremos cobrar lo mismo que un diputado. Tenemos que denunciar a esa casta de parásitos políticos, mientras nosotros trabajamos cada día en las escuelas por un sueldo de miseria”.

La semana pasada escuchamos las voces de la calle y el tren tras la masacre de Once. Ahora fuimos a las escuelas. Una cámara donde aparece la denuncia, donde brota la bronca, donde hay que estar.