Este miércoles tuvo lugar la primera sesión extraordinaria del año en la Legislatura, ante un pedido de Marcelo Ramal del bloque del FIT para abordar la falta de vacantes y los problemas que salieron a la luz con la inscripción online. La banca del FIT presentó un proyecto para asegurar la inscripción integral e incondicional de todos los alumnos de los niveles inicial, primario y secundario inscriptos mediante un Comité de Control con la participación de docentes y familias afectadas.

Al pedido de sesión del bloque del FIT se sumaron todos los bloques opositores al PRO y se consiguió convocar la reunión de este miércoles 26, pero a pesar conseguirse el quórum para sesionar, el PRO impidió con sus votos que los proyectos se puedan tratar sobre tablas y ser votados. Esta maniobra dejó claro su desinterés en solucionar los problemas educativos de la Ciudad y los de miles de chicos que quedarán sin vacantes. Para ellos, se trata de un trámite.

Los bloques del Frente para la Victoria y el UNEN parecieron quedar satisfechos con la sesión extraordinaria abortada. Sólo pretendían denunciar al macrismo en los micrófonos, pero no dar soluciones de fondo a las familias y a los docentes que tendrán que trabajar en aulas container. El FPV sigue con la política de hacer infinitas denuncias en los medios, pero en lo esencial dejan gobernar tranquilo al PRO. ¿O acaso no podría la dirección de UTE convocar a todos los docentes a enfrentar esta movida del PRO contra la educación pública? UNEN, a su vez, parece dispuesto a ser el aliado que el PRO necesita en la Legislatura para lograr pasar los proyectos del Ejecutivo.

El PRO intentó con UNEN dar vuelta la página con otra sesión para repudiar un tweet de Luis D´Elia. Aunque suene increíble, no encontraron otra forma de intentar tapar las críticas. El gobierno de Macri mantiene su línea de una Buenos Aires para los negocios amigos, entre los cuales está el de la construcción, que esta semana se llevó la vida de otro trabajador en una obra que se derrumbó por incumplir los controles y mantener a los obreros en las peores condiciones. A la paritaria docente que pretende cerrar en 25% se le suma el aumento del subte y la crisis habitacional de la ciudad. Esta semana fue asesinado un hombre durante una toma de tierras cercanas al Parque Indoamericano, volviendo a poner de manifiesto la enorme crisis de vivienda que hay en la ciudad. Una y otra vez surgen los problemas estructurales de la Buenos Aires profunda que no tuvo otra solución que desalojos y represión de parte del gobierno porteño y el nacional, como en las tomas del propio Indoamericano en 2010.

La banca del FIT en la Ciudad sigue estando a disposición de todas estas peleas justas. Somos conscientes que el PRO, el FPV y UNEN piensan en 2015 y no en los problemas de los trabajadores y el pueblo de Buenos Aires, por lo que tenemos que acompañar a esta banca desde los sindicatos como Ademys o las agrupaciones clasistas como las del subte, telefónicos, estatales y trabajadores inmigrantes que pelean contra la prepotencia patronal, y todos juntos torcerle el brazo a estos proyectos de una Buenos Aires a medida de los empresarios.