NEUQUEN (AN)- Entre hoy y mañana, la Policía deberá cumplir con una orden de desalojo de la cerámica Zanon que la semana pasada le impartió la Justicia. Si no lo hace, no se descarta darle intervención a otra fuerza de seguridad que podría ser la Gendarmería. En un último intento por evitarlo, los empleados presentaron ayer un hábeas corpus.
El largo conflicto de los empleados de Zanon, quienes reclaman el cobro de sus sueldos, se instaló ayer en el campo judicial. Según trascendió, el juez Eduardo Badano intimó a la Policía provincial para que cumpla la orden de desalojo que dictó el jueves pasado. La institución le prometió que cumplirá antes del jueves de esta semana.
Fuentes judiciales y gremiales consultadas por "Río Negro" explicaron que cuando Badano dispuso el desalojo de los operarios que ocupan la planta del Parque Industrial, la Policía le respondió que por "cuestiones operativas" no podía cumplir la orden. "Los numerosos frentes de conflicto social y la inminencia de las elecciones fueron los argumentos", explicaron.
También la semana pasada, el juez se reunió con el abogado de los ceramistas, Mariano Pedrero, y le sugirió que aprovechara el tiempo para encontrar una salida que evite el desalojo violento. "Nosotros hicimos todo lo posible, fuimos a todas las reuniones, pero la solución no aparece", explicó Pedrero.
El lunes, apenas pasado el acto eleccionario, Badano intimó a la Policía para que cumpla la orden. La nueva respuesta fue que lo harán antes del jueves. El delito que estarían cometiendo los empleados es una de las formas de usurpación, y castiga al que "con violencia o amenazas, turbare la posesión de un inmueble". En este caso, se comete cuando se impide el libre acceso o salida de la cerámica.
Justamente ayer la subsecretaria de Trabajo, Alicia Comelli, les recomendó a los operarios: "no hay problemas mientras ustedes permanezcan en la planta con retención de tareas. El límite se cruza cuando se impide el acceso y salida de la planta". Fue durante un breve contacto que tuvieron funcionarios y gremialistas al término de un acto policial en la cárcel U11.
El ministro Gorosito también tuvo un párrafo que pareció dedicado al punto actual en que se encuentra conflicto: "quienes detentamos el uso de la fuerza pública, debemos tener la suficiente firmeza para no caer ante la tentación de algunos pedidos fáciles de utilizarla. Hay que diferenciar bien la conflictividad social de la persecución del delito".
Desde la justicia se explicó que "sea justo o no el reclamo de los trabajadores, hay una denuncia de la empresa de que se está cometiendo un delito".
La fuente que habló con este diario dijo que "si la policía no está en condiciones operativas de cumplir con su función, habrá que recurrir a otra fuerza de seguridad". Es posible entonces que la justicia convoque a la Gendarmería para desalojar.
Ante lo que calificó como "inminente represión", el abogado Pedrero presentó ayer el recurso de hábeas corpus preventivo para que la orden de desalojo quede desactivada. "Estamos haciendo todos los intentos de negociación posibles para destrabar el conflicto pero la solución no aparece", dijo el representante de los ceramistas. "El viernes le hice una propuesta a la empresa y todavía no respondieron", agregó. Ahora intentarán que los reciba el gobernador Jorge Sobisch.
En tanto, en Buenos Aires se informó que un grupo de bancos y fondos de inversión podría comprar la mayoría accionaria de Cerámicas Zanon. El consorcio estaría liderado por el banco Crédit Suisse, que invertiría 15 millones de dólares para reactivar la planta fabril.
Al respecto, Pedrero explicó que "me reuní con la gente del Crédit Suisse, planteó la voluntad de invertir, pero no sé qué hará la empresa".