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Derechos Humanos

La causa ESMA

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19 de octubre 2007

¿Por qué casos va a juicio Héctor Febrés?

Febrés aparece acusado por 4 casos: Alfredo Margari, Carlos García, Carlos Lorkipanidze y Josefa Prada de Olivieri. Prada de Olivieri fue contactada por la fiscalía, pero no se sabe si será tenido en cuenta su testimonio. Con Margari y García compartimos el cautiverio de la ESMA durante un tiempo, porque cuando yo llegaba poco tiempo después ellos se iban. No es un juicio menor, se trata de la llamada megacausa ESMA.
¿Qué opinión te merece este juicio?

Para mí este juicio es un chiste. Es la megacausa ESMA pero están acusando a Febrés que prestaba servicios en la Prefectura.
Más allá de que, sin ninguna duda, Febrés se lo merece porque es un represor, desde un aspecto simbólico me parece todo un precedente. En la causa ESMA pasaron más de 5000 personas, más de 300 marinos genocidas fueron identificados, pero la impunidad en la Armada sigue vigente. Quiero destacar que del cuerpo de la causa fueron retirados los casos de tortura seguidas de muerte como el caso de Raimundo Villaflor. Es una vergüenza: encima bajo todo tipo de argumentos leguleyos apartaron a la sobrina de Villaflor que intervenía en la causa como querellante. Todos los querellantes queremos que los más de 300 represores identificados de la ESMA vayan presos.

¿Cuáles son las características de este juicio?

El juez de instrucción Torres está haciendo una operación pérfida porque está desmembrando de conjunto la causa ESMA.
Por un lado, la causa de Febrés se desarrolla como un incidente aislado. Después toma la causa Walsh también separada. Hace lo mismo con la causa de la Iglesia de Santa Cruz, donde secuestraron a Azucena Villaflor, fundadora de las Madres de Plaza de Mayo, y a las monjas francesas Leónie Duquet y Alice Domon. Y por último, también como otro caso aislado, aparece la causa de “Jeringa” Barrionuevo, un personaje siniestro que aplicaba inyecciones a los detenidos- desaparecidos que había que trasladar de la ESMA. Me parece que hay una política tendiente a garantizar la impunidad de todos estos genocidas, y en particular a la marina como institución. Desde que se anularon las leyes de obediencia debida y punto final sólo hay 3 presos: el “turco” Julian, Miguel Etchecolatz y el cura Von Wernich. Lo bárbaro de estos juicios es que son reducidos a la acusación de una sola persona, haciendo a un lado la responsabilidad integral de todo el circuito represivo. Por ejemplo: más allá de otros crímenes, Von Wernich el cura es acusado de 7 asesinatos. En realidad, me parece que correspondería juzgar a todos los implicados en el circuito Camps, que abarcan a muchos más que a Von Wernich.

¿Qué función cumple el gobierno?

El gobierno es ambivalente porque juega permanentemente con un doble mensaje que quedó en evidencia en el juicio a Von Wernich. Cuando el gobierno se presenta como Secretaría de Derechos Humanos, aparece como querellante pidiendo justicia por el asesinato de 7 personas. Pero cuando el gobierno aparece como la fiscalía plantea la absolución del cura por uno de los desaparecidos y pide justicia sólo por los 6 restantes. Es decir que una parte acusa mientras la otra garantiza impunidad. Si se hubiese avanzado en esta dirección sería un desastre porque daría pie a sentar el precedente de que los desaparecidos están vivos.

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