En el día de ayer la policía provincial reprimió duramente a trabajadoras y trabajadores desocupados del Frente de Organizaciones Independientes (FOI). Esta fue la respuesta del gobierno ante el reclamo de participación en los planes de obras públicas y en los capacitadores en el área de educación no formal, que estas organizaciones iniciaron el miércoles con cortes de ruta debido a las promesas incumplidas durante meses por Barrionuevo.

24 hs antes de esta represión el gobierno ordenó con la misma policía el desalojo de más de 100 familias sin vivienda del Barrio Malvinas dejando a varias mujeres y hombres hospitalizados. Estos no son hechos aislados. En los últimos años de crecimiento económico ordenaron la represión policial sobre las comunidades originarias para arrancarles sus tierras y entregarlas a los monopolios azucareros, a los sojeros como en El Talar o a los especuladores inmobiliarios de la Quebrada y empresas Mineras, mientras a los trabajadores les daban aumentos miserables y manteniendo el trabajo precario y los planes de indigencia de $150. El año pasado vimos la violenta represión a los trabajadores de La Quiaca mostrando una vez más el doble discurso del gobierno provincial y nacional sobre los derechos humanos. Ante los primeros síntomas de la crisis estas acciones represivas quieren hacer callar a los trabajadores y dejar pasar los ataques del gobierno con el decreto 2.613 que congela la planta docente, los tarifazos como el del GAS o los despidos como en Aceros Zapla o Minera El Aguilar.

En el caso de la oposición de Snopek se mantuvo en silencio ante todos estos hechos represivos y ataques al bolsillo de los trabajadores. Por su parte, la UCR desde su llegada al municipio capital comenzó con la mano dura desalojando vendedores ambulantes en una provincia donde la desocupación, la pobreza y sus enfermedades como el dengue y la rabia afectan a miles de trabajadores. No es de extrañar su actitud tratándose de partidos conformados por empresarios y funcionarios que viven del Estado a costa de los trabajadores. Repudiamos el accionar represivo de las fuerzas policiales bajo las órdenes del gobierno de Barrionuevo y la complicidad del PJ y la UCR.

En momentos que el gobierno y el resto de los políticos-empresarios del PJ y la UCR avalan los despidos y preparan ajustes más duros, necesitamos la más amplia unidad de las filas obreras ocupadas y desocupas para enfrentar sus ataques. Por eso es lamentable que organizaciones sociales afines al gobierno nacional aprieten a trabajadores en lucha como sucedió durante el corte de ruta del miércoles del FOI o luego de que éstos sufrieran la represión policial. Repudiamos este accionar que no hace más que dividir las filas obreras frente al gobierno y las patronales que se benefician de la existencia de la desocupación superexplotando a los ocupados ya que existen miles que los pueden reemplazar y esta división les permite aplicar más fácilmente los futuros ajustes y despidos. Por esto, exigimos la ruptura de estas organizaciones con el gobierno nacional. Además llamamos a las organizaciones combativas a poner pie una campaña de exigencias para que las direcciones sindicales y sociales rompan la tregua con el gobierno provincial y convoquen a la movilización y al paro provincial para reabrir las paritarias que imponga un salario mínimo igual a la canasta familiar ajustable por inflación, el aumento de los planes sociales, el pase a planta permanente, frene los tarifazos y prohíba los despidos, y pelear por un plan de obras públicas bajo control obrero que construya las viviendas, escuelas, hospitales necesarios y genere trabajo genuino para todos, entre otras medidas, para que efectivamente la crisis la paguen los capitalistas y no los trabajadores.

Partido de Trabajadores Socialistas (PTS) en el “Frente de la Izquierda y los Trabajadores, anticapitalista y socialista”, PTS-MAS-IS.

Jujuy 08-05-09