Al cierre de esta edición culminaba una nueva jornada de huelga general en Grecia en respuesta al plan de emergencia anunciado por el gobierno de Giorgos Papandreou, que contiene entre otras medidas la suspensión de 30.000 empleados públicos.

Miles de personas pararon y se manifestaron en varias ciudades de Grecia. La mayor concentración se realizó en la plaza Sintagma en Atenas. La 5 quinta huelga del año paralizó gran parte del transporte terrestre y aéreo, los hospitales, escuelas y oficinas públicas.

Mientras el FMI, el Banco Central Europeo y la Unión Europea negocian nuevos rescates para los bancos (como el franco-belga Dexia), millones en Grecia sufren los planes de austeridad en medio de un desempleo altísimo, especialmente juvenil: 1 de cada 3 jóvenes está desocupado y la minoría que trabaja lo hace precarizados y con salarios bajísimos.

Las centrales sindicales (GSEE, de privados, y ADEDY del sector público) ya anunciaron una próxima medida para el 19/10. Sin embargo, estas centrales mantienen sus lazos con el PASOK (partido de gobierno que aplica el ajuste) y se niegan a llevar los paros más allá de meras acciones de presión.

En más de un año los trabajadores protagonizaron 15 paros generales, que no han podido frenar el ajuste del PASOK. Las direcciones del movimiento obrero han mantenido divididos a los trabajadores con acciones impotentes. Está claro que la salida no vendrá de estas direcciones, es necesario forjar una alternativa de independencia de clase que plantee la huelga general política como medida para tirar abajo este gobierno e imponer el no pago de la deuda, la nacionalización de la banca y de las grandes empresas sin compensación bajo control de los trabajadores, un plan económico de emergencia que dé solución a los problemas más acuciantes de los trabajadores y las masas pobres que entre otras medidas plantee la eliminación del IVA, el reparto de las horas de trabajo sin rebaja salarial y un salario equivalente a la canasta familiar.