Ley 25.520 de Inteligencia Nacional - Art. 4°
“Ningún organismo de inteligencia podrá (…) Obtener información, producir inteligencia o almacenar datos sobre personas, por el solo hecho de su raza, fe religiosa, acciones privadas, u opinión política, o de adhesión o pertenencia a organizaciones partidarias, sociales, sindicales, comunitarias, cooperativas, asistenciales, culturales o laborales, así como por la actividad lícita que desarrollen en cualquier esfera de acción.”
Los marxistas revolucionarios no le reconocemos ninguna autoridad a este Estado de los explotadores para hacer inteligencia sobre organizaciones que pelean contra la explotación y la opresión. Pero no dudamos en mostrar cómo a la burguesía y sus gobiernos (hoy el “progresismo” de CFK) no les tiembla el pulso para pisotear sus propias leyes cuando se sienten amenazados. O cuando, como en este caso, se proponen terminar con el legado de las jornadas revolucionarias de 2001, retornando a la “normalidad” de la democracia burguesa, basada en la explotación de la mayoría nacional por parte de una minoría parasitaria.