El viernes 2 de Julio se hizo una movilización y corte en la esquina de Avenida San Martín y Urquiza, en pleno corazón de Caseros (Tres de Febrero). La acción fue convocada por la comisión de solidaridad con los trabajadores despedidos de Peugeot y participaron más de 200 personas. Se logró realizar en pleno centro político del municipio la primera medida contra esta multinacional francesa. Peugeot despide y precariza impunemente con el aval del Hugo Curto (intendente de Tres de Febrero) y la UOM, que ejercen un férreo control sobre los trabajadores. El año pasado esta empresa (a la que Cristina Kirchner le da millonarios subsidios, como el REPRO) despidió a más de 2000 obreros, mientras la UOM “convencía” a los trabajadores de los beneficios de las indemnizaciones.

Del acto del viernes participaron organizaciones como el Centro de Profesionales por los Derechos Humanos y la Asamblea de Villa Bosch, delegaciones de fábricas como la Ex Jabón Federal, de la Unión Ferroviaria del Sarmiento, comisiones internas de fábricas de la zona, de Comercio y docentes, entre otros. Participaron concejales de Coalición Cívica y Nuevo Tres de Febrero y se leyó la adhesión de Liliana Piani, Vicepresidenta 2° de la Cámara de Diputados bonaerense. Durante el acto también se leyó el petitorio que ya firmaron Pino Solanas, Victoria Donda, Martín Sabatella, Beatriz Iturraspe y Margarita Stolbitzer, entre otros, exigiendo la reincorporación de los despedidos y el cese de las persecuciones gremiales.

“Nada justifica los despidos”

Todas las intervenciones denunciaron lo persecutorio de los despidos, la precarización de los trabajadores y las pésimas condiciones de trabajo en la fábrica, lo que deriva en un alto número de accidentes. Alejandrina Barry, del CeProDH, denunció el oscuro pasado de Peugeot, recordando que el actual embajador argentino en Francia, Luis Ureta Sáenz Peña, ex directivo de la planta hasta 2007, públicamente reivindicó a la dictadura firmando una declaración donde valoraba el accionar de las fuerzas armadas.
Fernando, despedido de Peugeot, cerró el acto denunciando que “nada justifica nuestros despidos más que la persecución y discriminación, por lo que seguiremos exigiendo nuestra inmediata reincorporación. Porque mientras esta empresa de capitales franceses se llena los bolsillos en Argentina burlando las leyes laborales, los trabajadores somos despedidos por hacer escuchar nuestra voz o por solidarizarnos con los reclamos de nuestros compañeros”.

Corresponsal