Felisa Miceli salió a atacar nuevamente a los trabajadores del INDEC acusándolos de corporativos y defender los intereses de los bonistas extranjeros... 
Sí, antes había sido Aníbal Fernández diciendo que éramos mafiosos y forajidos, mientras una custodia armada en el 3° piso y un cordón policial en la puerta garantizaban que se manipularan los datos para sacar el índice que le convenía al gobierno. 
Lo que dice Miceli de que somos corporativos es ridículo. Si el 1,1% sirve para que la patronal negocie nuestro salario a la baja en las paritarias, mantener los miserables planes sociales, decir que hay menos pobres ¿quién sino este gobierno es el que defiende y a cualquier precio los intereses corporativos de los empresarios y los suyos propios ante las próximas elecciones? Al contrario, los trabajadores no sólo defendemos nuestro interés como trabajadores del INDEC sino en todo caso los de esa gran corporación que formamos los millones de trabajadores y pobres de este país, perjudicados por esta mentira que armó el gobierno. Además, quería aclarar que lo que dice Miceli también es en respuesta a la concentración del día anterior, abrazando al INDEC, cortando la calle, con banderas denunciando los índices truchos. 
 
¿Han cambiado las condiciones de trabajo con la intervención?
En el sector del IPC los aprietes y presiones son constantes. La semana pasada cambiaron a compañeros de sus puestos de trabajo para que la interventora Beatriz Paglieri pusiera a su gente. Los encuestadores ahora tienen que entregar la información directamente a esta señora, lo que no sólo es una barbaridad metodológica sino un concreto amedrentamiento. Una encuestadora ayer decía “a mí seguro que me llama porque traje los precios aumentados”. Con esta presión se trabaja a diario.  
Los directores se borraron o avalaron los índices truchos. Los trabajadores y los técnicos somos los únicos que estamos en la pelea, incluso negándonos a publicar los datos de pobreza e indigencia ya que estaban hechos en base a los datos del IPC manipulados. Así hicieron los técnicos de la Encuesta Permanente de Hogares (EPH). Esto es un ejemplo de que para lograr que este organismo sea independiente del poder político de turno, los trabajadores y los técnicos somos la única garantía. Por eso estamos proponiendo crear un directorio de trabajadores y técnicos, que haya concursos transparentes y con nuestro propio control a través de asambleas. 
 
¿Cuál ha sido la posición de la CTA?
Desde las asambleas se reclama el apoyo concreto de la CTA pero hasta el momento no ha puesto todo su peso para que se escuche otra voz en este tema de tanta repercusión. Ni una denuncia pública contra la intervención más allá de un comunicado de ATE difundido sólo en el INDEC. Con respecto a ATE Capital no llamaron a un plenario y mucho menos a un paro. No ponerse a la cabeza de esta lucha no sólo permite que el gobierno tenga cada vez más injerencia en el organismo, sino que deja a los trabajadores sin una importante herramienta, que es nuestra denuncia sobre la mentira del aumento del costo de vida, para que por ejemplo los trabajadores suban el piso en las negociaciones paritarias. 
 
¿Cómo sigue esta pelea?
Seguimos realizando asambleas y paros de dos horas por día. El 5 de marzo cuando se anuncie el IPC marcharemos al Ministerio de Economía. Por eso estamos invitando a organizaciones de trabajadores, sociales, de defensa al consumidor, profesionales, a acompañarnos. Se ha recorrido la Cámara de diputados y hemos ido a ver a los trabajadores del subte y a distintas dependencias estatales.