(Neuquén; 01/06/07) A un mes de haber vuelto a las escuelas, después del cierre del paro que empezamos el 5 de marzo, queremos compartir algunas de las reflexiones que venimos haciendo con muchos compañeros y compañeras en distintas reuniones, encuentros y en las escuelas.
En este mes que pasó muchos/as compañeros/as hemos tenido distintas iniciativas para intentar dar una respuesta de conjunto a los ataques que hemos recibido constantemente de parte del gobierno y los punteros. Pero las conducciones Naranja y Azul y Blanca, fieles a la tregua firmada con el gobierno, siguen con su política de vaciamiento y desmovilización del sindicato.
EL AÑO EMPEZÓ CON UNA OLEADA DE HUELGAS DOCENTES
Nacionalmente, el gobierno y los burócratas sindicales de la CGT dirigida por Moyano, venían intentando establecer un tope al reclamo salarial de todos los trabajadores privados, que finalmente lograron fijar en un mísero 16, 5 %. A tono con esto, Filmus y Yasky firmaron un acuerdo salarial que intentaba poner un techo de $1.040, para frenar el reclamo de los docentes de todo el país y promover a Filmus al gobierno de la Ciudad de Bs. As. Este anuncio desató el reclamo de miles de trabajadores de la educación a lo largo del país; más de 10 provincias comenzaron el año con paros docentes.
ERA NECESARIO UNIFICAR LAS LUCHAS A NIVEL NACIONAL
Desde la primera asamblea, mocionamos que ATEN exigiera a CTERA un plan de lucha nacional para unificar y potenciar los conflictos que en ese momento se estaban dando. Al mismo tiempo sabiendo que sería muy difícil imponer esto a quienes habían firmado el acuerdo con Filmus, planteamos que era necesario convocar a todas las seccionales opositoras y provincias en conflicto a un encuentro nacional, para discutir un plan de lucha común contra el salario de miseria, el trabajo en negro y el avance de la Ley Nacional de Educación.
El paro que debía convocar la CTERA nunca llegó. Así fueron desactivadas las luchas en la mayoría de las provincias salvo en Salta, Neuquén y Santa Cruz. Por eso seguimos insistiendo en la necesidad de unificar y nacionalizar.
La conducción de Aten capital, estaba en condiciones de hacer este llamado, ya que Venero y Winderbaum son integrantes del MIC (Movimiento Intersindical Clasista) y Priscila Otton del MST y ambas organizaciones son parte dirigente de distintas seccionales opositoras a CTERA, a nivel nacional.
Pero no sólo se negaron a llamarlo sino que, desconociendo el mandato de asamblea, nunca lo defendieron en el plenario de secretarios generales.
COORDINAR ERA PROFUNDIZAR
A nivel provincial, sabíamos que nos enfrentábamos al gobierno del MPN, que no se caracteriza por su disposición al diálogo, y que el año pasado, con las patotas en Plaza Huincul, demostró a qué está dispuesto.
Teniendo en cuenta que en los últimos años, después de largas luchas en las que cada sector peleó por su lado, se consiguieron muy pocas o ninguna reivindicación, desde el principio del paro, propusimos:
· unificar con los compañeros de salud que venían denunciando el desmantelamiento del sistema por los bajos salarios, entre otras cosas.
· convocar un paro de toda la CTA para luchar juntos contra el presentismo, por salario igual a la canasta familiar para todos/as y en defensa de la Salud y la Educación públicas.
Ya que, como dijimos en reiteradas oportunidades, en Neuquén hay recursos para eso, porque las petrholeras extraen miles de pesos por minuto y al Estado provincial le quedan otros miles por regalías.
Las direcciones de ATEN, en lugar de desnudar esto y llamar a todos los estatales a una lucha en común, se limitaron a decir:
· que los dirigentes de ATE boicoteaban nuestro paro en las cocinas de las escuelas.
· que nuestros reclamos eran distintos, ¿cuáles? ¿el presentismo? ¿los bajos salarios?¿ la defensa del sistema público de salud y educación?
· que los compañeros de salud se querían colgar de nuestro conflicto ¿los que salieron porque mataron a un compañero se querían “colgar” de nuestro conflicto?
¿No necesitábamos una lucha del conjunto de los trabajadores para derrotar las políticas privatizadoras de la educación y la salud publicas?
A esto, también se negaron las conducciones de ATEN capital y provincial.
GANARSE LA COMUNIDAD PARA GANAR EL CONFLICTO
Planteamos que era clave ganarnos a la comunidad, explicarle por qué estábamos luchando, sumar sus reclamos a nuestro pliego, decirle a toda la sociedad que la campaña publicitaria del gobierno es mentira: que no trabajamos 4 hs., no tenemos 3 meses de vacaciones, ni somos los mejores pagos del país, y sobre todas las cosas que en una provincia petrolera, en un país que tiene 40.000 millones de dólares de reserva, los trabajadores podemos y debemos pelear por lo que es nuestro. Propusimos:
* campañas publicitarias, spots televisivos, solicitadas que fueron votadas varias veces pero no fueron llevadas adelante consecuentemente.
* que ATEN convocara a una multisectorial (estatales, ceramistas, estudiantes, organismos de DDHH, etc.) para discutir de conjunto un plan de lucha común.
A eso también se negaron. Sólo la convocaron, a regañadientes, el día anterior al corte en Arroyito para decirles a los demás sectores en qué debían colaborar.
ERA POSIBLE ECHAR A SOBISCH
Y así llegamos a este punto terrible del conflicto, en condiciones desfavorables: solos, aislados sin planear la autodefensa. Y el gobierno fusiló a Carlos frente a nuestros ojos. Y nuestra lucha se transformó en la lucha de miles y miles que en todo el país se unieron al grito ¡Fuera Sobisch asesino! Y el 9 de abril la CTERA se vio obligada a llamar al paro nacional que tanto había esquivado.
Y en Neuquén, en una marcha de más de 30.000 personas, Guagliardo dijo: gracias por venir, los invitamos a pensar cómo seguimos luchando y nos organizamos para seguir acampando en la plaza. Se perdió un momento histórico, una semana histórica.
El MPN le había soltado la mano a Sobisch: Luz Sapag dijo que debía hacer un paso al costado, su candidato a gobernador no dijo una palabra sino hasta después de la convención del partido. Y una vez más, los dirigentes de ATEN no estuvieron a la altura de la situación política. Ante nuestra propuesta de Asamblea Provincial (votada en la asamblea de Aten Capital por amplia mayoría) la conducción no hizo nada por llevarla adelante y a cambio llamó a una burocrática “intersindical”. Era el momento de preparar la huelga general, no como simple paro de actividades laborales o como suma de paros sectoriales, donde cada uno reclama lo suyo, sino como una acción política, un levantamiento obrero y popular que derrotara a Sobisch. Y esto era posible porque había una tendencia a la unificación de los distintos sectores en lucha. Lo que hacía falta era avanzar en ese camino. Había que profundizar la unidad y coordinación con los sectores obreros y populares. En primer lugar con los que estaban en lucha como los estatales y los de Zanon. Y junto a ellos convocar a una gran Asamblea Provincial de Trabajadores, para llegar a las bases de camioneros, petroleros y demás sectores obreros, donde dirige la CGT.
Las conducciones Naranja y Azul y Blanca hicieron lo imposible por levantar el corte de los puentes que nunca sostuvieron y no tomaron en sus manos la responsabilidad que les cabía de llamar a la organización para tirar a Sobisch y dejar a todos los trabajadores de la provincia y del país en mejores condiciones para exigir justicia y el cumplimiento de nuestros reclamos. Eligieron impulsar el camino de la negociación con el asesino y le dieron al MPN el tiempo que necesitaba para rearmarse y salir a la ofensiva: una semana después Sobisch firmaba el decreto 448 de emergencia educativa, habilitando la entrada de los docentes rompehuelgas y los punteros en las escuelas. Sentando así un grave precedente contra el derecho a huelga, al tiempo que redoblaba la campaña publicitaria en nuestra contra. Por eso en la última asamblea mocionamos rechazar un acta que no exigía el juicio y castigo a los responsables políticos y materiales del fusilamiento de nuestro compañero, que no anulaba el decreto 448/07, ni exigía la devolución de los días de paro...
Los dirigentes de ATEN separan lo sindical de lo político para justificar que se negaron a organizar la lucha para tirar a Sobisch, permitiendo que se quedara y pasara a la ofensiva. De esta manera nos dejaron en peores condiciones para imponer, incluso, las reivindicaciones gremiales.
La actuación de la conducción durante todo el conflicto puso de relieve los límites de la política corporativa, consistente en separar los reclamos de ATEN de los del conjunto de los trabajadores. Por eso desde la Agrupación Negra peleamos por que nuestro sindicato desarrolle una política que supere estos límites impuestos por las conducciones, apostando a la coordinación y unidad de los trabajadores, a profundizar las instancias democráticas de decisión, fortaleciendo el cuerpo de delegados, las asambleas por escuela y las distritales, para que el plenario de Secretarios Generales no tenga “poder de veto” por sobre las decisiones de las Asambleas. Poner el cuerpo, como hemos venido haciendo todos estos años, es necesario pero no suficiente. Tenemos que organizarnos en forma permanente para pelear por esta política y construir una oposición clasista y anitiburocrática en ATEN. Desde la Negra ponemos todos nuestros esfuerzos para avanzar en esa perspectiva. Porque lo que no se organiza previamente, no puede improvisarse en los momentos más agudos de la lucha.
Agrupación NEGRA en ATEN
Prensa
