La gran elección del FIT en Mendoza, encabezado por nuestro compañero Nicolás Del Caño, fue el dato destacado de las elecciones. Obtuvimos 75 mil votos, con los cuales llegamos al 7,6% en el conjunto de la provincia, llegando incluso al 10% en los departamentos más populares como Las Heras, Guaymallén, Godoy Cruz, Luján y Maipú, demostrando que la izquierda se abrió paso como una alternativa política para amplios sectores del pueblo trabajador.

La elección, que a nivel provincial dio como resultado la derrota del kirchnerismo, mostró una disidencia conservadora expresada en el 44% de los votos que obtuvo la UCR (encabezada por Cobos). Pero al mismo tiempo, se expresó la debacle de partidos de la derecha reaccionaria como el PD o Compromiso Federal (este último encabezado por el facho de Cassia). A su vez, la centroizquierda del FAP tuvo un fuerte retroceso, debilitado luego de que una de sus principales figuras (de Libres del Sur), rompiera el frente para ir en las listas de la UCR, por detrás del derechista Petri. Demostraron que el FAP es más amplio que progresista. En ese marco, la gran elección del FIT mostró que un amplio sector de trabajadores y de la juventud busca una alternativa por izquierda al fin de ciclo K y de las variantes patronales, tanto radicales como centroizquierdistas.

La gran campaña del Frente de Izquierda, con consignas como que todos los legisladores ganen lo mismo que una maestra, el fin del impuesto al salario y contra el trabajo precarizado, pusieron en la discusión electoral las condiciones de vida de amplios sectores de masas. Nos ubicamos así opuestos a las campañas despolitizadas y “de gestión” de los partidos patronales que buscan ocultar que nada tienen para ofrecerles a los trabajadores y el pueblo por fuera de esta Mendoza para empresarios del campo y la ciudad y sus políticos amigos.

El enorme rechazo hacia esta casta de políticos millonarios, que se subieron el sueldo un 65% este año mientras le pusieron el techo del 25% a las paritarias estatales, se transformó en una gran corriente de simpatía a la campaña del FIT. A los cientos de saludos y felicitaciones en las redes sociales y el apoyo recibido en decenas de agitaciones callejeras, centralmente de trabajadores de diversos sectores, se sumaron más de 100 fiscales y compañeros de todos los departamentos, derrotando los obstáculos en la distribución de las boletas por parte del Estado en miles de mesas en toda la provincia.

Esta gran corriente de simpatía no sólo fue por identificación con nuestras ideas, sino el reflejo de una gran campaña militante que desplegamos desde el PTS, con charlas en los colegios secundarios, miles de afiches y agitaciones en puntos neurálgicos de los principales departamentos y en lugares de trabajo como los principales hospitales, bodegas y escuelas.

El impacto que causó esta elección histórica, donde la izquierda se ubicó por primera vez como 3° fuerza electoral es impresionante. Trabajadoras del ajo, municipales, de la prensa, docentes, jóvenes y laburantes de toda la provincia nos escriben para felicitarnos y ponerse a disposición para colaborar hacia octubre. Miles y miles de trabajadores, mujeres y jóvenes nos transmiten su emoción por el impacto político de los resultados y sienten que al fin surge la izquierda para hacer escuchar la voz de los silenciados por la provincia “conservadora” de los empresarios.
Esta gran elección nos plantea dos objetivos de cara a las elecciones de octubre. Por un lado, la posibilidad concreta de obtener bancas tanto en el Congreso Nacional como en la Legislatura, para poder plantar una voz de los trabajadores y la juventud, como viene haciendo nuestro compañero Raúl Godoy, diputado neuquino. Por otro lado, queda planteada la posibilidad de transformar esa gran corriente de simpatía con nuestra campaña en una gran corriente de izquierda de los trabajadores en la provincia.