Christian Castillo, dirigente del PTS

“Estamos denunciando la provocación de los sectores kirchneristas que no quieren que la columna del Encuentro Memoria, Verdad y Justicia llegue a la Plaza porque vamos a denunciar que este gobierno es el que votó la Ley Antiterrorista, que este gobierno es el que monta el espionaje ilegal con el llamado Proyecto X, que es el que mantiene la persecución a más de 5 mil luchadores y es el gobierno que ahora está en pleno pacto con la Iglesia Católica, una de las tres patas de la Santa Alianza, junto con los grandes empresarios y las Fuerzas Armadas, responsables del genocidio de más de 30 mil compañeros. Entonces estamos señalando la decisión que tenemos de llegar a la Plaza y leer el documento de las organizaciones políticas, sindicales y de derechos humanos no alineadas y no subordinadas al gobierno nacional.”

Jorge Altamira, dirigente del Partido Obrero

“Para ser breves, el gobierno ha realizado un acuerdo con la Iglesia, algo que negaba hasta ahora y que ahora es explícito. De manera que los que se están concentrando hoy en nombre del oficialismo están pisoteando la causa, porque inclusive los grupos que encabezan esto son la parte del oficialismo que apoya el acuerdo con la Iglesia. Ahora, la Iglesia es un sostén de la dictadura militar y vemos a gente que hoy está firmando un pacto con la Iglesia pretendiendo usurpar la conmemoración de la jornada. Quiero agregar lo siguiente: en este pacto figura la participación de la Iglesia en la reforma del Código Civil. Así que advierto a la izquierda, al movimiento feminista y a todo el movimiento democrático de que ahora se viene una pesada porque vamos a tener una reforma del Código Civil clerical.”

Myriam Bregman, abogada del CeProDH y militante del PTS

“Este 24 de marzo estamos marchando una vez más para que esto no sea meramente un acto conmemorativo sino una verdadera jornada de lucha, y para que así sea necesitamos reactualizar año a año las consignas por las que nos movilizamos, porque somos los primeros en exigir Juicio y Castigo por los 30 mil detenidos desaparecidos. Somos los que día a día estamos en los juicios de lesa humanidad, para conseguir juicio y castigo pero, a su vez, somos los denunciantes de la violación a los derechos humanos y por las libertades democráticas de hoy, por eso este 24 de marzo estamos en esta marcha para exigir juicio y castigo y por los chicos apropiados y que tanto la iglesia como el Estado tienen archivos que al día de hoy se niegan a abrir.”

Alejandrina Barry, hija de desaparecidos e integrante del CeProDH

“Mi nombre es Alejandrina, mis viejos están desaparecidos desde 1977, Juan Alejandro Barry y Susana Mata, y mis tíos Susana Barry y Alejandro Papik, por Fuerzas Armadas conjuntas uruguayas y argentinas, secuestrados por la patota de la ESMA.

Yo creo que el 37° aniversario del golpe no es sólo un día de memoria sino un día de lucha, porque la impunidad continúa en el presente sobre los militares, los civiles y la jerarquía eclesiástica. También queremos denunciar el espionaje y la persecución que existe hoy. Por eso hay dos marchas. La particularidad de este 24 de Marzo se da con la asunción de Bergoglio como nuevo papa, que causó conmoción en los sectores de la oposición de derecha que siempre han defendido la impunidad de los genocidas. Sin embargo, también se dio un operativo del gobierno que yo denuncio es de “reconciliación nacional”, porque en principio salieron con un discurso cuestionando la relación de Bergoglio con la dictadura, pero días después como no les convenía políticamente y porque no tienen ningún tipo de convicciones, salieron a alabar al nuevo papa.

La Iglesia colaboró con la dictadura en tanto institución de conjunto, no sólo la jerarquía sino muchísimos curas como Von Wernich que pudimos enjuiciar. El gobierno armó un nuevo relato como el que planteó Cristina en Mansión Seré diciendo que “no queremos más odio”, porque los genocidas eran “gente fea”. Fue un insulto a los que somos hijos de desaparecidos. Nosotros no perdonamos, no nos reconciliamos, y queremos el juicio y castigo para todos los responsables, incluyendo todos los miembros de la Iglesia Católica que fueron parte, que bendijeron los centros clandestinos de detención, que entregaron compañeros. En el caso de mi tío, en particular, el obispo Graselli presenció las torturas. No es como dice el Vaticano, algo que simplemente nosotros decimos, sino que es algo probado hace ya muchos años. Es lamentable que muchos organismos de derechos humanos que hoy comulgan con el gobierno renuncien a denunciar esto que es algo fundamental para terminar con la impunidad.

Victoria Moyano, hija de desaparecidos e integrante del CeProDH

Hoy, a 37 años de la dictadura en Argentina, marchamos por juicio y castigo a los responsables civiles, militares y eclesiásticos. Marchamos por los 400 hermanos que tienen sustituida su identidad. Marchamos por Julio López, por Silvia Suppo, por Luciano Arruga. Porque las libertades democráticas no están resueltas, como se demuestra en el espionaje de “Proyecto X”, donde todos los que nos organizamos y nos movilizamos somos investigados, espiados por las Fuerzas de Seguridad del Estado. Marchamos para que no haya más “Proyecto X”, por el desprocesamiento de los 5 mil luchadores, para que no haya más muertos en luchas populares. Yo vengo denunciando que hay una continuidad en el plan represivo. Siendo yo una víctima del Plan Cóndor, comenzó el juicio en el que me presenté como querellante para que se investigue la desaparición de mis padres, e inmediatamente después tuve que denunciar que me estaban espiando. Me investigan con el único fin de perseguirnos por estar en las luchas de los trabajadores, como lo pudimos ver en la lucha de Kraft y en la lucha de los compañeros de PepsiCo. Es evidente que no podemos marchar solamente por las demandas del pasado sino también por las del presente. Esto es lo que nos diferencia de la marcha convocada por los organismos afines al gobierno.