portante para mí el libro [Patrones en la Ruta]? En primer lugar recuerda que la Argentina es un país agrario, esto parece una obviedad pero no lo es. La Argentina es un país donde el 90% de la población vive en ciudades; la Argentina es un país que siendo un país agrario paradójicamente nadie vive en el campo. […] ¿A que se debe esto? En la Argentina dada la intensísima, la altísima productividad de la tierra pampeana, del capitalismo agrario pampeano, la masa de la producción se produce con una escasísima población. De allí que la masa de la población se amontone en ciudades. No es un defecto de la estructura agraria pampeana, no es un defecto de la producción pampeana, no es un defecto del capitalismo pampeano, del capitalismo argentino. Al revés es el resultado de su terrible éxito. El agro más productivo del mundo, desde hace 150 años.

Siendo ésta la principal riqueza del país ¿cuál es la tarea que el proletariado se va a encontrar cuando haga la revolución en la Argentina? Construir una sociedad diferente. Con qué se va a construir una sociedad diferente sino es con la porción de la riqueza social producida en las condiciones técnicas de producción más avanzada de todas. Dicho de otra manera, con qué vamos a constituir el socialismo argentino con la chatarra de la industria argentina que no sirve para nada, salvo escasos ejemplos, o lo vamos a constituir con la enorme capacidad productiva del agro pampeano. Esto tiene una enorme importancia, porque después se refleja a quién expropiamos y a quién no expropiamos. […]

Lo primero que uno encuentra en el agro pampeano de los últimos 20 años es lo siguiente: en el agro pampeano no hay pequeña burguesía no explotadora, dicho de otra manera, no hay campesinos, eso es un disparate teórico y un disparate práctico. Un disparate teórico porque el campesino presupone la existencia de la comunidad campesina, la autosuficiencia, la no venta al mercado, etc. Y es un disparate empírico porque si algo así tuviera existencia teórica en la pampa no existe. […] Ningún burgués pampeano puede trabajar por sí mismo sin fuerza de trabajo externa, es decir sin ser un explotador, ninguna cantidad sustantiva de tierra que esté por debajo de las 500 hectáreas. Por el mismo sentido no existe en la Pampa la oligarquía terrateniente.

¿Por qué? Porque la tierra pampeana es muy cara y ningún capitalista serio va a comprar la tierra porque es inmovilizar una enorme masa de capital para nada. Esto tiene que ver cuando decimos vamos a expropiar a los grandes terratenientes. Expropiar a los grandes terratenientes no sirve para gran cosa. […] La idea de que hay que expropiar a la tierra es una idea correcta. La idea de que solo hay que expropiar a la tierra es una idea incorrecta, la idea de que en la región pampeana hay que expropiar a mil tipos es un disparate. […]

Más correcta [que la posición del MST y el PCR] nos pareció la posición de los compañeros del PO, del PTS y del MAS. Al PO le criticamos, está puesto en el libro, una posición vacilante […] al PTS [que planteé] que el partido revolucionario de los trabajadores tiene que entrar en alianza con estos sectores, lo que pasa que están políticamente con la Sociedad Rural entonces no, quiere decir que si no estuviera con la SRA entonces sí. […]

Sobre la declaración de los intelectuales que estaban ni con el gobierno ni con el campo: un saludo a la bandera, porque [si no están] ni con este ni con otro ¿con quién? ¿hacer qué? Cuando uno lee lo que se proponen hacer es simplemente una declaración de principio que encima esta mal: la nacionalización de toda la tierra. ¿Para qué? La nacionalización de los grandes terratenientes, no de toda la tierra, lo cual ya es un error gravísimo porque con eso no hacemos nada; es más la mayor parte de esa tierra no tiene ningún valor.