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Juventud

Crisis política en la Universidad Nacional del Comahue

17 de marzo 2005

La ofensiva de la derecha universitaria

La derecha universitaria, encabezada por Pechen y el director de la Escuela de Medicina, Calvo, junto al MPN, el PJ y la UCR, iniciaron una gran campaña en los medios a favor del ingreso restricto, organizando a un importante sector de estudiantes de esa carrera, los llamados “autoconvocados”. Esta campaña combinó un discurso hacia la comunidad para ubicarse como defensores de la “excelencia académica”, junto a un violento ataque a los estudiantes y sectores que nos oponemos a cualquier restricción a la Universidad. Con el argumento de que sin cupos “colapsa” Medicina y el sistema de salud de Río Negro y Neuquén, lograron abroquelar a una derecha “militante” en la Universidad, como nunca se vio en la UNCo, llegando a partirse el Centro de Estudiantes de Medicina entre estos sectores, y quienes defendimos el ingreso irrestricto.

La maniobra de la rectora Pechen 

Parte de esta ofensiva fue la convocatoria para el 16 de marzo a una Asamblea Universitaria (AU), para sacar una declaración de apoyo a la rectora, revocar la decisión del Superior y avanzar en la reforma del estatuto de la Universidad. Esta convocatoria era una clara maniobra de Pechen, no sólo para mantener el examen de ingreso a Medicina, sino también para recomponerse del golpe que le dimos los estudiantes con la gran lucha del año pasado, y cambiar la relación de fuerzas que quedó a nuestro favor luego de la toma de noviembre. Es decir, estaba preparando un “contra noviembre” para avanzar nuevamente con las acreditaciones a la CoNEAU, la aplicación de la LES y sus políticas de elitización de la Universidad. A dos días de la fecha de esta AU, cuando la rectora no tenía garantizada la mayoría de los votos en la misma, la justicia federal anuló la resolución del Superior, e impidió con otro fallo a la AU tratar el examen a Medicina. 

La Asamblea Universitaria

Los estudiantes, junto a los obreros de Zanon, los movimientos de desocupados y organismos de DDHH, nos movilizamos el martes 15 a Cipolletti, para hacer un “acampe” y prepararnos para boicotear la AU y parar esta maniobra.
Pechen fue “recibida” por 400 estudiantes y trabajadores al grito de “universidad de los trabajadores y al que no le gusta se jode”, mientras unos 200 estudiantes “autoconvocados” de Medicina la recibían con los brazos abiertos, mostrando la polarización que también se abrió en el movimiento estudiantil.
En el primer intento de sesionar, Pechen no obtuvo el quórum necesario, demostrando su debilidad luego de la toma del 2004. En el segundo intento, logró el quórum con 82 asambleístas. Inmediatamente la “oposición”, encabezada por el decano Salgado, y el oficialismo se trenzaron en un debate sobre la ilegitimidad de la Asamblea. Cruzada por los cantos de “con los huesos de Pechen vamos a hacer una escalera, para que a la facultad, pueda entrar la clase obrera”, la rectora decidió levantar la asamblea.
El escenario que quedó luego de la AU es contradictorio: mientras que por un lado sigue abierta la crisis del régimen de la UNCo (quedando una rectora aún debilitada), la Pechen sí obtuvo “un respiro” al lograr quórum. A partir de este resultado, la lucha del movimiento estudiantil tiene planteado profundizar la debilidad del conjunto del régimen.

La política del movimiento estudiantil

En este contexto se abrió un debate sobre la intervención del movimiento estudiantil. Por un lado, la conducción de la FUC, la CEPA y el MNR (a los que lamentablemente cedió el PO), plantearon que había que acreditar a todos los asambleístas estudiantiles, “dar la discusión” y luego boicotear la asamblea. Por otro lado, desde En Clave Roja, junto al MST y activistas de Enfermería y de Servicio Social, planteamos rechazar esta asamblea por ser una maniobra, por su carácter antidemocrático y reaccionario, no acreditar y boicotearla. Esta diferencia parecía menor, pero esconde detrás diferentes estrategias políticas de cómo debe intervenir el movimiento estudiantil frente al régimen universitario.
La FUC en lugar de denunciar esta maniobra y boicotearla, como se había votado en la asamblea estudiantil, apostó a la falta de quórum para “impedirla”, para que la AU caiga “por su propio peso”, y no por la acción directa del movimiento estudiantil. Esta política (a la que se plegaron el MNR, la CEPA y el PO) fue la que permitió que la Pechen finalmente consiguiese quórum y pudiese evitar una crisis mayor.
Contrariamente a lo que sostenía la conducción de la FUC, estaba planteado, con la intervención independiente del movimiento estudiantil mediante la movilización y el boicot, evitar que la AU sesione y dar un paso adelante en la tarea pendiente desde noviembre: que se vaya Pechen.
Desde En Clave ROJA peleamos para que el movimiento estudiantil retome el camino de la lucha del año pasado para imponer nuestras demandas. Contra los fallos de la justicia y la política de Pechen, tenemos que volver a las asambleas Interfacultades y elegir delegados con mandato en los cursos, para votar un plan de lucha en Comahue y a nivel nacional para terminar con la LES.
 
 

Prensa

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