logo PTS

Mundo Obrero

ESTATALES Y DOCENTES DE CORDOBA

Córdoba: basta de chantajes, aumento salarial de emergencia ya

El gobierno de Schiaretti, que nació debilitado por las movilizaciones de miles contra el fraude y viene de sufrir una contundente derrota política en las elecciones del 28 de junio (en las que salió tercero), se enfrenta en estos días a una importante crisis desatada a raíz de la grave situación fiscal de la provincia. Alegando que la provincia no está en condiciones fiscales de garantizar los recursos que adeuda el gobierno nacional, Schiaretti ha venido poniendo en duda el pago de los sueldos a los empleados estatales, llegando incluso a chantajear con la posibilidad de declarar la ley de emergencia económica como antesala de la emisión de bonos.

PTS

3 de septiembre 2009

El gobierno de Schiaretti, que nació debilitado por las movilizaciones de miles contra el fraude y viene de sufrir una contundente derrota política en las elecciones del 28 de junio (en las que salió tercero), se enfrenta en estos días a una importante crisis desatada a raíz de la grave situación fiscal de la provincia. Alegando que la provincia no está en condiciones fiscales de garantizar los recursos que adeuda el gobierno nacional, Schiaretti ha venido poniendo en duda el pago de los sueldos a los empleados estatales, llegando incluso a chantajear con la posibilidad de declarar la ley de emergencia económica como antesala de la emisión de bonos.

Schiaretti agita el fantasma del “desfinanciamiento de la caja provincial” con la intención de disciplinar cualquier reclamo de aumento salarial. Presiona sobre el gobierno nacional exigiendo el envío de 370 millones de pesos en concepto de cuotas del Programa de Ayuda Financiera y de la Caja de Jubilaciones. Si bien las finanzas provinciales dependen en una importante medida de recursos controlados por el gobierno nacional, lo que no quieren discutir ni el gobierno nacional ni el provincial es un esquema en el cual un gran porcentaje de los enormes recursos que genera la provincia, va a parar a subsidios a las grandes multinacionales automotrices y a la oligarquía sojera del interior cordobés a la que Schiaretti tanto apoyó en la defensa de su rentabilidad. Mientras los jubilados sufren la amenaza de cobrar su sueldo fraccionado, las patronales del campo y la ciudad reciben millones de pesos en exenciones impositivas.

Los trabajadores estatales tenemos que plantear una salida

Más allá del anuncio del envío de 120 millones de pesos por parte del gobierno nacional, hecho un día antes de la marcha convocada para el viernes 28 por el SEP (empleados públicos) y la UEPC (docentes), la presencia de más de 10 mil trabajadores en las calles muestra que la solución de fondo a esta grave crisis está lejos de encontrarse. Los trabajadores demostramos claramente que no queremos que nos hagan pagar una crisis que no generamos, como intentó hacer Angeloz en 1995 cancelando los pagos por 4 meses y emitiendo bonos, lo que terminó con su gobierno en el marco de una importante lucha estatal. La profundización de la crisis en Córdoba, que dependerá en buena medida de la capacidad de lucha de los estatales, puede tener el efecto de acelerador de la crisis política nacional, con un kirchnerismo cada vez más debilitado que, en el contexto de la crisis económica, probablemente no pueda responder a la situación fiscal abierta en provincias tan importantes como Córdoba o Buenos Aires. Es por eso que para el gobierno de Schiaretti es tan importante garantizar la contención de cualquier escenario de protesta generalizada.

Para esto cuenta a su favor con el nefasto rol de las direcciones sindicales del SEP y la UEPC, que apuestan una vez más a la estrategia de desgaste con paros aislados y por sector, y que no sólo terminarán frustrando nuestras expectativas de recomponer nuestras condiciones laborales y nuestro salario, que se viene degradando aceleradamente producto de la inflación, sino que jugarán cuando sea necesario el rol de garantes de la “paz social”. Bajo la política que impulsan estas direcciones es imposible frenar los ataques del gobierno, por eso exigimos un plan de lucha serio hasta imponer nuestras demandas, y de ser necesario, la convocatoria a un paro general provincial. Desde la Agrupación Docente D-BASE, que impulsamos desde el PTS junto con compañeros independientes, tuvimos una participación destacada en la movilización, a la que llevamos nuestro planteo de que la crisis la tienen que pagar los que la generaron, para lo cual es necesario que el conjunto de los trabajadores estatales hagamos pesar nuestra enorme fuerza social en las calles con un plan de lucha unificado, dejando claro que si no cobramos no trabajamos, y reclamando a su vez una inmediata recomposición salarial del 35% en el camino de un salario acorde a la canasta familiar en base al cese de los subsidios a las patronales automotrices y rurales.

Erica Guazzaroni

Docente del PTS y de Docentes D-Base

Prensa

Virginia Rom 113103-4422

Elizabeth Lallana 113674-7357

Marcela Soler115470-9292

Temas relacionados: