El acta “maldita” del 16/10 es la que sentenciaba la paz social con la empresa. Por suerte la nueva Interna que surgió y ganó oponiéndose a la firma de la misma tampoco la acató y, aún antes de asumir, convocó a sendas movilizaciones (ante la Cámara Americana y la UIA). Después hubo distintas formas de luchas. Cortes de Panamericana, de la 9 de Julio, de la Av. Alem (recordemos que el acta decía que la Interna se comprometía a no cortar calles ni rutas); la semana pasada se realizaron batucadas en todos los turnos para expresar el descontento ante la intransigencia de la empresa en reincorporar a más compañeros y negar un bono de fin de año.

Como forma de reforzar la solidaridad se propuso la donación del ticket de comida para los despedidos y el aporte para el fondo de huelga en el cobro de quincena. Se realizaron asambleas en el comedor en los turnos de comida. Ahí se vio que la base de la fábrica quiere retomar paulatinamente su pelea y no comenzar directamente con paros contundentes. Es normal después de una dura lucha de 2 meses que finalizó en forma abrupta cuando aún había energías para arrancar más y la vieja Interna firmó el acta y cuando se está organizando nuevamente el Cuerpo de Delegados que fue, de hecho, disuelto en el conflicto. Pero que no se equivoque la empresa si cree ver en esto debilidad. Los trabajadores de Kraft no aceptarán sin resistir nuevos ataques.

Las provocaciones

La empresa ha mantenido los juicios por desafuero a 5 de los miembros de la anterior Interna entre los que se encuentra Javier Hermosilla, para despedirlos. El jueves 3 estaba citado el compañero Alfonso Alcadio.

Finalmente la audiencia se pasó para el año próximo. El 22 está citado Bogado. La flamante CI no solo se hizo presente en el inicio de ese juicio sino que sacó una declaración especial dedicada al tema que se distribuyó masivamente en la planta. Mientras la CCC difundía un boletín que ni hablaba del tema pero se dedicaba a calumniar a la nueva Interna acusándola de funcional a la patronal y que había ganado con un fraude montado por Kraft. Este ataque ridículo es funcional a los planes de la empresa y también a Daer porque genera división, y es hora de que termine.

Entre las provocaciones patronales está la nueva medida cautelar solicitada por Kraft para que Javier Hermosilla no pueda ingresar a la planta. A los pocos días de haber asumido, la empresa presentó un pedido para que se dicte una cautelar con argumentos inverosímiles, que deberían haberse rechazado sin dilaciones.

A su vez, la norteamericana Kraft sigue sin aparecer por el Ministerio de Trabajo, ya que rechaza esa instancia pese a que se dictaminó que esto no era legal. El Ministerio la intima para que reincorpore y concurra y Kraft se burla. Si una sola empresa es capaz de desairar de esa manera al Ministerio y su gobierno sin que se haga nada, imaginemos como va a actuar el gobierno frente a las presiones de las Cámaras empresarias o sectores de la patronal como las que se manifiestan hoy jueves en el Rosedal.

A su vez Kraft se niega a dar el bono de fin de año, como forma de vengarse de la dura lucha que le paralizó la producción durante tanto tiempo, y queriendo desprestigiar a la Interna.

Un nuevo día de lucha

Este miércoles 9 nuevamente se cortó la Panamericana, mientras los estudiantes cortaban en Corrientes y Callao. Nuevamente el conflicto de Kraft estaba en los medios. A las seis y media de la mañana un grupo de trabajadores del turno noche acompañó esta vez a compañeros despedidos, junto con delegaciones de partidos de izquierda para subir a la Panamericana. En ese momento los estudiantes que durante semanas colaboraron enormemente para que el conflicto transcienda, estaban en Callao y Corrientes, cortando y difundiendo esta lucha de casi 4 meses. A las 10 de la mañana comenzaba el plenario del Sindicato de la Alimentación. La Comisión Interna de Kraft junto a un grupo de despedidos fue hacia allí a llevar el mandato de la mayoría de los obreros de Kraft que mediante un petitorio exigían que el sindicato pusiera el dinero necesario para sostener a los despedidos y exigían también un paro nacional de la alimentación.

Antes y durante el Plenario de delegados del STIA (ver recuadro), durante 5 horas se mantuvo una vigilia frente a la Unión Industrial Argentina, cortando parcialmente el tránsito de Av. de Mayo., para finalmente acompañar a la delegación de dirigentes, despedidos y abogados a una nueva audiencia. Como era de esperar, la patronal no concurrió y el Ministerio volvió a intimar. Fue otra larga jornada de lucha donde no sólo se desenmascaró la actitud del monopolio yanqui, sino del papel cómplice del gobierno y el rol de rompehuelgas de Daer y la Lista Verde que dirigen el sindicato de la alimentación. La dilación que hace el Ministerio que ni siquiera hace cumplir sus propias resoluciones, la traición de Daer al negarse a apoyar esta lucha, es lo que colabora para que haya despedidos que tengan que “arreglar” con la empresa que los chantajea. Así y todo van casi 4 meses de conflicto y la persistencia de un grupo de despedidos es notable. Lo hacen desde el 16 de octubre enfrentando el acta que los condenaba desde entonces a la desocupación. Sufren la prepotencia de la empresa, la traición del Sindicato y lamentablemente la falta de apoyo de la Interna anterior que se niega a concurrir a la inmensa mayoría de las actividades.

Los trabajadores despedidos se volverán a reunir el viernes para discutir los pasos a seguir en esta situación difícil. Mientras, dentro de la planta se avanza en la organización. En estas condiciones los trabajadores de Kraft buscan abrirse paso. El PTS mantiene todo su apoyo como desde aquel 18 de agosto cuando la empresa pensó que iba a derrotar a los trabajadores con despidos masivos y tuvo como respuesta una magnífica lucha. Sigue la pelea con los despedidos mientras se organiza la fábrica preparándose para lo que se viene.