Desconocimiento e indiferencia. Estas palabras resumen la opinión de muchos porteños frente al Código Contravencional, a un día de que la Legislatura proceda a discutir artículo por artículo el nuevo Código aprobado el 7 de julio pasado. Así lo comprobó Clarín en un recorrido por diferentes barrios de la Ciudad. Y el mismo resultado se desprende de la opinión de los legisladores y de una encuesta realizada por una universidad privada.
"Sí, sería bueno que la ciudad fijara normas de conducta, como, por ejemplo, no permitir que en un boliche se vendan más entradas que la capacidad permitida", coincidieron Mariana Kalustian y Laura Martínez, amigas, las dos de 19 años, una vecina de Mataderos y la otra de Villa Luro. "¿Así que el Código trata estas cosas? La verdad, no sabíamos", se sorprendieron segundos después, en la charla que tuvieron con este diario al pasar frente a la Legislatura porteña.
"¿El Código Contravencional? Ah, el del quilombo que se vio en la tele los otros días", dijo en cambio Augusto Valles, cuando salía de una boca del subte A, en Plaza de Mayo. Varios fueron los vecinos que echaron mano a esta relación "Código=incidentes", al preguntárseles si sabían de qué trataba. Pero la mayoría vacilaba a la hora de dar precisiones: prostitución y venta ambulante fueron los conceptos más repetidos.
"El Código Contravencional de la Ciudad de Buenos Aires sanciona las conductas que, por acción u omisión, implican daño o peligro cierto para los bienes jurídicos individuales o colectivos", fija en su primer artículo el Código actual, vigente desde que en 1998 reemplazó a los polémicos edictos policiales. Regula las faltas que no se consideran delitos (éstas forman parte del Código Penal), como la oferta de sexo en la vía pública o la venta ambulante sin permiso.
El desconocimiento general del Código es algo que palparon los propios legisladores. El diputado Julio De Giovanni (Partido de la Ciudad), uno de los principales operadores de la redacción de las reformas, comentó: "Las agrupaciones piqueteras vinieron a protestar a la Legislatura calificando de "fascista" al nuevo Código, porque según ellos les cercena el derecho a manifestarse. Yo les digo: calma, muchachos. El artículo 66, que sanciona la "obstrucción de la vía pública" es prácticamente el mismo que el artículo 41, del Código vigente: no es una contravención si se reclama un derecho constitucional y mientras se avise a las autoridades".
El nuevo Código Contravencional, que fuera aprobado a comienzos de julio, recién empezará a regir cuando sean votados cada uno de sus 122 artículos y después de publicarse en el Boletín Oficial.
El tratamiento "en particular" del nuevo Código se truncó el 16 de julio pasado, cuando los manifestantes anti reforma sitiaron el Palacio Legislativo, con piedras y palos. Ayer fueron procesadas 15 personas detenidas ese viernes.
Una encuesta realizada a 450 porteños por el Centro de Estudios Globales de la Universidad Abierta Interamericana confirma la indiferencia y desconocimiento que envuelven a muchos vecinos: poco más del 50% optó por las respuestas "desconoce el Código" o "no sabe/no responde" cuando se le preguntó qué cambios en su vida había provocado el Código de Convivencia. El 15,1% mencionó categorías relacionadas con la oferta sexual: "aumentó el libertinaje", "legitimó a los travestis" y hubo "un aumento de la oferta sexual en la calle".