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Apagón y servicios desastrosos

Caos en la Ciudad en medio de la campaña electoral

29 de marzo 2007

El lunes 26 comenzó el apagón y el martes más de 650.000 personas se quedaron sin luz, sin agua o se inundaron en la Ciudad de Buenos Aires. Para sorpresa de los "candidatos" en campaña, en los barrios afectados miles de personas salieron a golpear cacerolas, a prender precarias fogatas, como una pequeña advertencia de que algo queda en pie de las jornadas del 2001.
¿Cómo pudo suceder? Como en los ‘90 de Menem...La renegociación del contrato de concesión entre Edesur y el Ministerio de Economía de Kirchner, convalidó "valores de referencia mínimos de inversión para hacer frente a los requerimientos más urgentes". Así, el gobierno autorizó a invertir un 40% menos de lo programado en 2005, y un 30% menos en 2006. Lo mismo podría decirse del resto de las empresas privatizadas, que además cuentan con subsidios millonarios.
En la ciudad, donde se adelantan las elecciones, hay protestas continuas de los usuarios de subte y trenes que muchas veces terminan en violentas irrupciones de usuarios. Ahora se suma la falla en el sistema de radio que controla los vuelos (radares fuera de servicio) en los aeropuertos. La crisis del transporte público (que en Chile ya se cobró cuatro ministros) es un hecho.
En la ciudad del boom inmobiliario y de la construcción, la crisis de la vivienda emergió impiadosamente con el incendio, seguido de muerte de una joven mujer, en la Villa El Cartón. Sólo una muestra de los padecimientos a los que están sometidos los habitantes de los veinticuatro nuevos asentamientos (ver LVO 222) . Mientras tanto, los partidos patronales siguen enriqueciendo a las grandes corporaciones (Puerto Madero, Corporación Sur, Credil y tantas otras).
En la Ciudad de Cromañón, hay menos de cincuenta inspectores para cientos de miles de locales, comercios, fábricas, escuelas. Mientras el gobierno de Telerman hace campaña denunciando el trabajo en negro, es el propio Estado porteño el que cuenta con 14.000 trabajadores contratados, pasantes y distintas modalidades de precarización. Con esas modalidades se contrata al 60% de los nuevos empleos, desde los jóvenes de los ‘call centers’ y supermercados hasta los que en los talleres textiles del Bajo Flores trabajan en condiciones de semi esclavitud.

Aquí están, estos son...
Los políticos de los partidos patronales, incluyendo los llamados "progresistas," parecen todos candidatos de un mismo partido. No existen entre ellos diferencias sustanciales.
Jorge Telerman fue vice-jefe de gobierno de Ibarra, es co-responsable de la masacre de Cromañón. Sus lazos profundos con la Iglesia se remontan a cuando fue Secretario de Prensa de Antonio Cafiero. En los ‘90, con Menem, fue agregado de prensa en la embajada argentina en EE.UU. En el-‘90 y ‘91 su sueldo lo pagaba la SIDE. Luego fue asesor de campaña de Duhalde en el ‘99. Con él está un pedazo del Partido Socialista, un pedazo de la Unión Cívica Radical, un pedazo de algunos punteros justicialistas.
Daniel Filmus fue secretario de Educación de Grosso, y partícipe en la elaboración de la Ley Federal de Educación menemista. Socio de Ibarra en la Ciudad, armó la nueva ley de educación. Está apoyado por el aparato de punteros del Partido Justicialista de la Capital Federal que maneja Alberto Fernández e incluye personajes como "la Tuta" Muhamad (el patotero que agredió a las enfermeras del Francés) y burócratas sindicales como Víctor Santa María (parte de la derecha peronista porteña).
Frente a esta farsa del "progresismo" es Macri quien, utilizando el recurso de la demagogia y las relaciones punteriles, busca ganar una base social no sólo entre sectores de las clases medias alta sino también entre los más pobres. Así logró, además, unificar a la derecha y que Lavagna no presente candidatos propios.

¿Quién representa los intereses de la clase trabajadora y el pueblo?
En la Ciudad de una población de casi 3 millones de habitantes, trabajan 1.600.000. El 40% de ellos habitan en el conurbano bonaerense desde donde viajan diariamente, mientras que, a su vez, mas del 10% de los ocupados que viven en la Capital trabaja fuera de la ciudad. Esta ciudad que tiene una alta composición de trabajadores que no tienen representación política, y muestra como contracara a los Macri, Telerman o Filmus, las luchas como la de los trabajadores del Hospital Francés o del INDEC.
Las elecciones de Capital plantean la necesidad de un Frente Clasista y Socialista para levantar un programa de denuncia de la Ciudad al servicio de los capitalistas y oponerle las demandas de la población y los trabajadores ausentes de la agenda electoral patronal. Parece una ironía que toda la campaña electoral discurra sobre "cómo administrar" la Ciudad, cuando ninguno de sus problemas estructurales puede resolverse sin una salida de fondo a los grandes problemas nacionales.
Ante el caos de los servicios públicos, es una necesidad expropiar a los privatizadores y poner bajo administración obrera y de los usuarios la electricidad, el servicio de agua, el gas o el transporte que manejan los capitalistas para su beneficio. La necesidad de la reforma urbana que, sobre la base de la confiscación de las grandes propiedades y un plan de construcción de vivienda controlado por los trabajadores de la construcción, pueda asegurar el techo para los que no lo tienen. Estos, entre otros ejes centrales de un programa obrero y popular, pueden ser agitados ampliamente en estas elecciones. Un Frente Clasista y Socialista para que la izquierda sea un polo político, como proponemos en contratapa, que llame a construir un gran partido de la clase trabajadora.

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