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Comunicados de prensa

Absolvieron al policía que fue imputado de haber dejado paralítica a una chica inocente

Prensa PTS

11 de noviembre 2004

Un ex policía que dejó paralítica de un balazo a una joven universitaria cuando se tiroteó con ladrones que asaltaron un local de Quilmes, en julio de 2001, fue absuelto ayer en un juicio oral en el que la propia víctima del hecho y sus familiares abandonaron la sala de audiencias en medio de gritos, durante la lectura de la sentencia.
En el mismo debate oral, tres delincuentes recibieron penas de entre 16 y 17 años de prisión por los delitos de "robo doblemente calificado y tenencia ilegal de arma de guerra", entre otros.
Carla Lacorte, la joven que quedó paralítica tras haber sido baleada por el policía, presenció durante más de una hora la lectura de la sentencia, aunque se retiró del lugar al igual que sus familiares en medio de gritos e insultos, disconforme con lo que escuchaban.
"Es todo una mentira, acá (los jueces) utilizaron testimonios de personas que en verdad declararon otra cosa totalmente distinta durante el juicio oral", dijo la joven cuando abandonaba los tribunales de Quilmes en su silla de ruedas.
El Tribunal Oral tres de Quilmes entendió que la joven Lacorte fue herida por un rebote de la bala disparada por el efectivo exonerado de la policía bonaerense José Ignacio Salmo, por lo que ordenó su absolución.
Los jueces Alicia Anache, Armando Topalian y Oscar Hergott desestimaron, de esta manera, los argumentos del fiscal del juicio, José María Gutiérrez, quien había pedido cinco años de cárcel para el ex policía, ya que entendió que había actuado "con dolo eventual".
El hecho ocurrió el 1° de julio de 2001 cuando Carla Lacorte descendió de un colectivo en la esquina de Mitre y Brandsen, de Quilmes, y recibió un balazo por la espalda.
Según la acusación, al momento de ser baleada, la mujer quedó atrapada en una persecución de policías a delincuentes que huían tras asaltar un local de la cadena McDonald"s, donde una banda mantuvo durante siete horas a una mujer y a su beba privadas de la libertad.
La víctima, quien al momento de ser baleada estudiaba veterinaria y retornaba a su casa procedente del Correo Central, relató durante el juicio oral que la bala que la hirió partió del arma de Salmo y "esto, incluso, se determinó a través de los peritajes realizados al proyectil", precisó.
Sin embargo, los jueces entendieron en base a la declaración de peritos que la bala disparada por el policía rebotó y que una esquirla ingresó en su cuerpo.
En ese tramo de la lectura de la sentencia, Lacorte y sus familiares estallaron en crisis y comenzaron a gritar en medio de la sala de audiencias contra el ex policía acusado y contra los jueces, tras lo cual se retiraron del lugar.
"Estaba probado que este tipo me tiró a matar. Están dejando impune un caso de gatillo fácil", se quejó Carla al retirarse.
"Desde que empezó el juicio vimos que Salmo estaba dejado bastante impune, porque nos negaron varios trámites", protestó.
Desde un principio, la querella había manifestado su disconformidad con los puntos de vista de este tribunal, ya que solicitaron el cambio de carátula por una más grave, lo que fue rechazado por los jueces.
Es que Lacorte quería que el ex policía fuera acusado por el delito no excarcelable de "tentativa de homicidio", porque asegura que los policías estaban convencidos de que ella era la "campana" de la banda e, incluso, recordó que cuando estaba herida en el piso la zamarrearon y le dijeron "vos estabas con los chorros".
Por este motivo, la querella recusó a los miembros del tribunal, lo que derivó en la suspensión del juicio durante más de diez días, hasta que una cámara confirmó al Tribunal Oral 3 a cargo del debate.
Tras una interrupción de varios minutos y luego de aguardar que se retiraran todos los familiares de Lacorte, los secretarios del tribunal continuaron con la sentencia.
Durante el debate oral, los jueces también condenaron a los tres delincuentes que cometieron el robo al local de McDonald"s y que derivó en el tiroteo que finalizó con Lacorte herida.
El tribunal condenó a Gerardo Medrano y a Damián Herrera a 17 años de cárcel por el delito de "robo doblemente calificado por haberlo cometido con armas y en poblado y en banda, privación ilegítima de la libertad y tenencia de arma de guerra", entre otros.
En tanto, Pablo Garro fue condenado a 16 años por el delito de "robo doblemente calificado, con armas y en poblado y en banda". 

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