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LIBERTADES DEMOCRÁTICAS

A seis años de la desaparición y asesinato de Luciano Arruga

“A Luciano lo mató la policía y lo desapareció el Estado”, “Fuera la policía de nuestros barrios”. Este 31 de enero nos movilizamos masivamente por el castigo a los policías asesinos, junto a su hermana, madre y familiares, organizaciones de derechos humanos como Hijos, Correpi, APDH, Cels y CeProDH, el SUTEBA y partidos políticos que integramos el FIT.

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23 de enero 2015

A seis años de la desaparición y asesinato de Luciano Arruga

“A Luciano lo mató la policía y lo desapareció el Estado”, “Fuera la policía de nuestros barrios”. Este 31 de enero nos movilizamos masivamente por el castigo a los policías asesinos, junto a su hermana, madre y familiares, organizaciones de derechos humanos como Hijos, Correpi, APDH, Cels y CeProDH, el SUTEBA y partidos políticos que integramos el FIT.

El PTS, la secretaría de DD.HH.de SUTEBA y el CeProDH, somos parte de esta convocatoria. Exigimos cárcel a los policías responsables, denunciamos la desidia y la impunidad del gobierno de Cristina Kirchner, Daniel Scioli, Fernando Espinoza y sus funcionarios, que han mantenido estos años el entramado de encubrimiento. Ya lo denunció Christian Castillo desde su banca del FIT en la Legislatura bonaerense cuando le fue negado el pedido de interpelación al Ministro de Justicia Ricardo Casal y al Ministro de Seguridad Alejandro Granados por el caso.

La causa de Luciano pudo ser conocida por millones en todo el país por la denuncia y movilización de su familia y organismos de DD.HH. independientes del gobierno.

Esta lucha es contra el aparato represivo del estado intacto desde la dictadura, con más de 9.000 efectivos de la Policía Bonaerense que continúan en funciones como se dio a conocer en la lucha por la aparición con vida de Julio López. Los distintos gobiernos constitucionales han mantenido la impunidad de las fuerzas de seguridad, necesarias para su dominación. Las utilizaron para la represión interna, contra las luchas sociales y obreras como vimos este año contra los indomables trabajadores de Lear que han logrado que se retire la gendarmería de la Panamericana por la brutal represión. Pero también las usaron para el “control social” en los los barrios populares, particularmente sobre la juventud. Desde el ´83 a esta parte han sido asesinados más de 4.300 jóvenes, de esta escalofriante cifra 2.300 se produjeron durante 11 años de gobiernos kirchneristas, lo que no deja dudas que es una política de Estado. 
 
La teoría del accidente, una provocación para encubrir la responsabilidad policial, judicial y política

A seis años de la detención de Luciano, apareció su cuerpo, enterrado como NN en el Cementerio de la Chacarita.Se confirmó la peor hipótesis del destino del joven al igual que Jonathan Herrera en Rosario o Franco Casco, Ezequiel Demonty y tantos jóvenes asesinados por la maldita policía. A pesar de querer desviar el caso como un accidente de tránsito, las declaraciones de un motoquero testigo y del conductor del auto que atropelló a Luciano, echaron luz sobre los verdaderos responsables: la policía bonaerense que lo obligó a correr por la General Paz. 

La mentira del accidente se cae conociendo las prácticas mafiosas de la Policía, como también el encubrimiento del Poder Judicial que se negó durante años a investigar a la Policía y caraturarlo como desaparición forzada de persona. Esta teoría del accidente sólo busca sembrar confusión y trabas en la investigación para hallar a los policías responsables del asesinato de Luciano.

La responsabilidad del poder político

Como en todos los casos que atañen a sus Fuerzas de Seguridad, la política tanto del propio intendente de La Matanza, como del gobernador Daniel Scioli y la presidenta de la Nación ha sido el silencio cómplice. Llegar a la verdad sobre el asesinato de Luciano develaría que no es un caso aislado sino una práctica de la policía que buscan fortalecer.

Espinoza y Scioli en el 2014 han mostrado como un gran avance el egreso de más de 10.000 policías y en 2015 proyectan unos 15.000 más, para combatir la llamada inseguridad. Massa y los demás candidatos patronales aplauden. Pero Luciano fue desaparecido y asesinado por esta misma Policía, una mafia podrida irreformable, que maneja los grandes delitos, como la trata de personas, el narcotráfico, los desarmaderos de autos, etc. Luciano se negó a robar para ellos, como son obligados miles de jóvenes de los barrios populares y pagó con su vida semejante desafío. 

El 31 de enero ganemos las calles

Es así que este 31 de enero tiene que ser un paso en la movilización y coordinación de los sectores independientes tanto de los gobiernos como de la oposición de derecha para acabar con la impunidad. Como fue en el caso de nuestra compañera Carla Lacorte, donde logramos la cárcel para el policía Salmo o el caso de Matias Casas que el jurado popular había condenado al policía asesino a cadena perpetua.

Este 31 estaremos junto a la familia de Luciano como desde el primer momento, con el mismo compromiso de fortalecer esta pelea hasta conseguir el juicio y castigo y enfrentar al Estado represivo.

Prensa

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Elizabeth Lallana 113674-7357

Marcela Soler115470-9292

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