Este lunes se cumplieron tres años del trágico incendio de la fábrica textil ubicada en la calle Luis Viale, que emplea alrededor de 60 trabajadores, la mayoría compatriotas traídos desde Bolivia. Allí, lamentablemente, perdieron la vida 6 personas, de las cuales 4 eran niños. Casi todos los trabajadores estaban en negro, sin gozar de ningún derecho laboral o social, trabajando más de 12 horas, en una reducción a la servidumbre, viviendo en la misma fábrica, con sus hijos.
A tres años, los hechos no han sido esclarecidos, y la causa puede quedar archivada. Los culpables, los asesinos – Jaime Geiler y Daniel Fischberg, Juan Manuel Correa y Luis Sillerico, pueden quedar impunes, con la ayuda del juez Baños.

A esto se suma la actitud indiferente del Estado boliviano, mientras el estado argentino tiene una política inmigratoria que afecta a miles de trabajadores bolivianos.

Dentro de la comunidad boliviana, la Coordinadora que se formó en su momento para llevar adelante esa lucha, lamentablemente desvió sus objetivos. Terminó haciendo trámites de documentación, y recibió muchas críticas por su trabajo. Se perdió la oportunidad de luchar por una causa que organice a los miles de explotados bolivianos, junto a todos los que trabajan en este país.

Hoy sigue siendo necesario organizarnos, para luchar por nuestros derechos junto a todos los trabajadores, porque no tenemos fronteras. Contra la explotación laboral, la precarización, los bajos salarios y la falta de representación que tenemos en nuestros lugares de trabajo. Y para no permitir más atropellos, como cuando el juez Oyarbide señaló – ante la explotación de las grandes marcas en los talleres textiles – que se trataba de “una costumbre del Altiplano”.

Por eso hacemos un llamado a los hermanos bolivianos, a las organizaciones obreras argentinas, para retomar la lucha porque se castigue a los responsables de estas muertes.

Juana Vilca Quispe (25 años), Wilfredo Quispe Mendoza (15), Elías Carbajal Quispe (10), Rodrigo Quispe Carbajal (4), Harry Rodríguez (3), y Luis Quispe (4), víctimas de la explotación capitalista. ¡Presentes!