Más de 10.000 platenses nos movilizamos el 2 de mayo a un mes de las inundaciones. Un mes sin respuestas ni soluciones. Un mes de encubrimiento sobre el número real de víctimas. Pero también un mes de organización en los barrios, lugares de trabajo y facultades; de desarrollo de asambleas vecinales y de la coordinación de esas asambleas; de elaboración de petitorios y recolección de miles de firmas reclamando por:

• Esclarecimiento del número real de víctimas

• Juicio y castigo a los responsables políticos 

• Subsidios y resarcimiento de todos los bienes perdidos. Suspensión por un año de impuestos y tasas sobre todos los bienes para todo el partido de La Plata y Ensenada 

• Inmediata ejecución de las obras hidráulicas bajo control y participación de las asambleas vecinales 

• Derogación del actual Código de Ordenamiento Urbano (COU) 

• Esclarecimiento de lo sucedido en YPF 

• Repudio a toda forma de amedrentamiento y violencia contra los miembros de las asambleas vecinales

La movilización comenzó en las puertas de la Municipalidad, donde las asambleas barriales leyeron un documento. Entre los puntos se mencionó el esclarecimiento del número real de víctimas y la creación de una comisión investigadora formada por familiares de víctimas y organismos de DD.HH.; juicio y castigo a los responsables políticos tanto del municipio como de la provincia y la nación; subsidios y resarcimiento de bienes y exenciones impositivas; derogación del Código de Ordenamiento Urbano municipal; y el fin del amedrentamiento a los vecinos de las asambleas por parte de “patotas del municipio”.

El documento expresó: “Consideramos que lo sucedido en la ciudad es producto de una cadena de responsabilidades que incluye a todos los niveles de gobierno (…) Municipio, Provincia y Nación, todos son responsables (...). Los funcionarios políticos quieren justificar las muertes por la cantidad de lluvia (...). Pero no hablan de las obras de infraestructura no realizadas, de cómo edificaron la ciudad según los intéreses de las inmobiliarias y constructoras, contra el pueblo platense. No hablan de la ausencia de botes, rescatistas, salvavidas y todo otro tipo de auxilio que no llegó esa noche en ayuda de los vecinos inundados. No hablan del día después y la ayuda que tampoco llegó del gobierno, sino de las manos solidarias de voluntarios que en todo el país donaron sus pertenencias para paliar las necesidades más urgentes que tuvimos quienes perdimos todo. Sólo hablan de los milímetros caídos para ocultar su responsabilidad política en el crimen social del 2 de abril. La búsqueda de justicia implica también hallar a los responsables”.

Luego la marcha se dirigió hasta Plaza San Martín para detenerse frente a la Gobernación de la Provincia, donde hablaron los familiares de las víctimas fallecidas durante el temporal.

Rocío Aguirre, hija de Irene Arias Burgos y de Raimundo Eliseo Aguirre, dijo en un desgarrador discurso: “Lo único que pedimos es justicia. Justicia porque eran personas de bien, justicia porque la ayuda nunca llegó, justicia porque mi mamá era discapacitada y mi papá dio la vida por ella, justicia porque no estuvieron antes, durante ni después. (...)”. “Les pido que nos acompañen. (...) A ver si entienden lo que es no tenerlos más, no tener ni siquiera donde llorarlos. A ver si entienden que la vida no vuelve más. Justicia. Hagan las obras que tengan que hacer. Que la muerte de mis padres sea el paradigma para que no vuelva a ocurrir”.
Luego le tocó el turno a Victoria, hija de Jorge Barnetche: “Él no tendría que haber muerto, porque se podría haber evitado. Yo quiero justicia y que Bruera dé la cara. Y espero que nadie se olvide de la gente que murió en la inundación”.